En una nueva manifestación de machismo homofóbico, un taxista atacó, y ofendió de palabra, recientemente, en Colombia, a una mujer, luego de que la víctima se identificó como lesbiana.
En declaraciones a medios de comunicación locales, la agredida, una joven identificada como Yeimy Paola Triana, relató que el incidente ocurrió la madrugada del 29 de mayo, dentro de un taxi, en Bogotá, la capital nacional.
El ataque derivó del hecho de que Triana expresó desacuerdo con la tarifa del viaje, la que consideró exageradamente elevada.
Al relatar el hecho, a la estación local de televisión City TV, la mujer indicó que, a raíz de los golpes que el atacante le propinó, con una herramienta para cambiar llantas, sufrió severas lesiones -que ameritaron asistencia médica- en la cabeza -incluido el rostro-, un brazo, y la espalda, por las cuales aguarda a someterse a una intervención quirúrgica.
“El tipo mi dice que son 40.000 pesos (poco más de 11 dólares)”, ante lo cual “yo le digo que está muy costoso”, comenzó a narrar.
“Él me dice: ‘¿Usted es lesbiana?’. Yo le digo: ‘Sí, pero eso qué tiene que ver?’. Él me responde: ‘Ah, nooo, el ‘machito’ no va a pagar’”, dijo, a continuación.
“Yo siento pánico, agarro el celular, para marcarle a mi hermana, pero él cierra el carro, y saca la cruceta, y empieza pegarme”, agregó,
En cuanto a lo que implica la brutal agresión que recibió, a causa, únicamente, de su orientación sexual, Triana expresó que se trata de una actitud lo mismo limitada que discriminatoria.
“Es muy triste, no ven la persona más allá”, reflexionó.
“Yo me considero buena hija, buena hermana, para sufrir una cosa de estas”, dijo, para agregar que “yo me levanto, me miro la cara y digo: ‘esta golpiza no tiene razón de ser’”.
Por otra parte, entrevistada en el programa “Sigue”, difundido por la emisora local La W, relató que la presentación de la denuncia, en la instancia policial, instituyó un acción que fracasó.
Al respecto, la joven dijo que la respuesta que recibió, en una instalación de la fuerza de seguridad, fue que, “si no es con una orden de Fiscalía, no me entregan el nombre del dueño del carro”.
Por su parte, el diario colombiano El Tiempo -que reprodujo las declaraciones de la víctima, a los otros dos medios-, indicó, en nota informativa que publicó el 4 de junio, que contactó a “Taxis Libres, la empresa a la que estaba vinculado el señalado agresor”.
“La compañía confirmó que fueron notificados de la denuncia el sábado 29 de mayo en la mañana por medio de una historia de Instagram que los conectaba con la denuncia de la víctima”, agregó.
Citada en el artículo, la gerenta de la empresa de transporte, Stefanía Hernández, dijo que “nos comunicamos con la persona para conocer más de lo sucedido”, al tiempo que indicó que “la novia de la afectada nos escribió por Instagram y le pedimos sus datos para que el centro de ayuda se comunicara”, además de puntualizar que “hemos estado en permanente contacto con la familia y la afectada hasta el día de hoy”.
Hernández precisó, además, que el agresor fue citado para comunicarle la decisión de bloquearlo de la app de Taxis Libres, además de que fue remitido a un programa de capacitación que, en materia de equidad de género, ofrecen, conjuntamente La entidad de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU Mujeres) y la capitalina Secretaría Distrital de la Mujer.
En materia de violencia contra población lesbiana, la abogada y activista de derechos humanos colombiana Carolina Gómez declaró, al inicio de junio, a la agencia informativa española Efe, que ese sector específico de la comunidad sexualmente diversa es blanco de diferentes modalidades de agresión.
“La violencia hacia las mujeres lesbianas tiene que ver sobre las expectativas que se tienen sobre la mujer”, indicó Gómez, citada el 2 de junio, por el medio de comunicación europeo.
“La mujer está faltando al rol de madre, porque tiene una mujer de pareja y no puede procrear”, agregó la abogada, quien es coordina el proyecto Enterezas, iniciativa que, respaldada por la española Fundación Triángulo, apunta a la erradicación de la discriminación y la violencia contra las integrantes de la comunidad de lesbianas, bisexuales, y transgéneros (LBT), en Colombia, Honduras, Nicaragua, y República Dominicana.
Al referirse a las diferentes variantes de agresión, enumeró “violaciones correctivas, matrimonios forzados, torturas de contenido sexual”.
Según datos de la Defensoría del Pueblo, mencionados por Efe, en el país sudamericano, en 2020, fueron asesinadas 76 personas de la comunidad sexualmente diversa, en general, un aumento de 58 por ciento, en comparación con 2019.
Por su parte, en una declaración que emitió el 17 de mayo, ONU Mujeres declaró apoyo a las personas de Orientación Sexual, Identidad de Género, Expresión de Género y Características Sexuales (Sexual Orientation, Gender Identity and Expression, and Sex Characteristics, Sogiesc) diversas, en los esfuerzos de ese sector poblacional mundial por enfrentar el odio y la discriminación.
Este ambiente incluye acciones policiales y militares que afectan a la población de lesbianas, gays, bisexuales, transgéneros, intersexuales, queer y más (Lgbtiq+) -incluidas personas de ascendencia africana, lo mismo que indígenas-, precisó la agencia especializada de Naciones Unidas, en el pronunciamiento de siete párrafos que difundió en el marco del Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia.
“ONU Mujeres se solidariza y apoya a todas las personas con orientación sexual, identidad de género, expresión de género y características sexuales (…) diversas en los esfuerzos encaminados por evitar, brindar apoyo y recuperarse del odio, el miedo y la discriminación”, señaló, en el texto.