La desnutrición puede disminuir la producción de leche, por lo tanto, es recomendable que la madre se hidrate de forma adecuada y tenga una dieta rica en fibras. 

Así como durante el embarazo, en la lactancia la mujer debe cuidar la alimentación porque todo lo que consume pasa al bebé a través de la leche materna, el déficit de nutrientes en la madre se verá reflejado en la salud de ella y de su hijo.

De acuerdo con Melania Cevo, algunos nutrientes como el sodio, calcio, hierro o zinc permanecen constantes en la leche aunque la ingesta materna aumente; otros como el yodo, el flúor y casi todas las vitaminas, dependen de la ingesta de los mismos que realice la madre.

“El consumo diario recomendado para las madres lactantes es de 2.700 kcal, frente a las 2.200 para mujeres no lactantes,  por lo que es muy importante mantener una salud nutricional óptima y una alimentación variada que se ajuste a sus necesidades”, expresó.

Recomendaciones nutricionales durante la lactancia

  1. No consumir alimentos flatulentos como garbanzos, pimientos, brócoli, coles, que pueden provocar gases en el bebé.
  2. Evitar las comidas muy picantes o especiadas que pueden provocar cólicos en el niño.
  3. Limitar el consumo de pescados enlatados o conservas, es mejor consumirlos frescos.
  4. Prescindir del alcohol y el café, las bebidas alcohólicas como la cerveza pueden disminuir la producción de leche, las bebidas con cafeína producen irritación e insomnio en el lactante.
  5. No fumar ya que la nicotina pasa a la leche materna y disminuye su producción.

Alimentos importantes durante la lactancia

Calcio: Durante la lactancia se produce una pérdida fisiológica del 3 al 7% del calcio óseo, que se recupera espontáneamente a partir de los 6 meses.

La suplementación con calcio no evita la pérdida inicial de masa ósea, ni acelera su recuperación posterior y  no aumenta el contenido de calcio en la leche materna, por lo cual no es necesario utilizar suplementos. La ingesta recomendada de calcio para las mujeres de 19 a 59 años es la misma, 1.000 mg al día, tanto si dan el pecho como si no.

Vitamina B12: proviene únicamente de proteínas de origen animal, por eso las personas vegetarianas requieren tomar suplementación para cubrir las necesidades nutricionales.

Estos suplementos son particularmente importantes para la embarazada y la madre en período de lactancia, que no consumen alimentos de origen animal, para evitar problemas en el bebé.

Ingesta de líquidos: La hidratación es muy importante, tanto durante la lactancia como en cualquier etapa de la vida, para saber cuánto líquido se debe ingerir simplemente se debe poner atención a la sed.

Yodo y hierro: Se recomienda la suplementación con yodo durante el embarazo y la lactancia. La ingesta recomendada de hierro se reduce a la mitad durante la lactancia, principalmente porque disminuye la pérdida menstrual de hierro. No se recomiendan suplementos de hierro a las madres, a no ser que tengan una anemia ferropénica.

“La madre lactante puede hacer una dieta libre, comiendo lo que quiera y la cantidad que quiera y bebiendo cuando tenga sed, pero una dieta rica en fibras, con verduras, frutas y cereales integrales, es clave para la buena nutrición de la madre y el niño, además de evitar el estreñimiento. No se debe seguir una dieta para perder peso, ya que las grasas acumuladas en caderas y muslos son la fuente de energía para la lactancia”, indicó la experta.

Recuerde que una dieta saludable no implica dejar de comer todo tipo de productos, sino aprender a consumirlos de forma adecuada y en las porciones recomendadas por su nutricionista.