Foto por Graciela Solís (con fines ilustrativos)

Sin perjuicio de la desigualdad que caracteriza a la región, las mujeres son, en Centroamérica, protagonistas de un tenaz esfuerzo de empoderamiento, traducido, entre otros aspectos, en la consolidación de emprendimientos productivos.

Se trata de iniciativas que, apoyadas por actores gubernamentales y del sector privado, y con respaldo institucional regional, apuntan a logar que, mediante capacitación y financiamiento, pequeñas y medianas empresarias del área logren independencia económica.

Las mujeres, quienes suman, en promedio regional, algo más de la mitad de los aproximadamente 53.6 millones de habitantes del istmo centroamericano, son más afectadas, por el desempleo y la informalidad laboral, que los hombres, respecto a los cuales, además, por igual trabajo, perciben salarios que son, en promedio, un 70 por ciento inferiores, de acuerdo con datos de organismos internacionales y regionales.

Al informar, el 31 de enero de este año, sobre las oportunidades laborales para las centroamericanas, el Sistema de la Integración Centroamericana (Sica) –que citó datos del costarricense Programa Estado de la Región-, señaló, en un comunicado, que, si bien registraron, en 2018, un aumento en materia de participación en ese campo, las mujeres no han logrado una inserción efectiva en el mercado de trabajo.

Al respecto, indicó que “la brecha entre la tasa de desempleo femenina y masculina creció durante el periodo 2000-2017”.

En tal contexto, en el marco del Sica, y respaldado por el gobierno de Luxemburgo, funciona el Centro Regional de Promoción de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Cenpromype), que implementa el Programa de Empresariedad Femenina en Centroamérica y República Dominicana.

De acuerdo con lo indicado en setiembre de este año, por el Sica, el programa abarca, puntualmente, siete de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (DOS).

Se trata de los objetivos respectivamente definidos como Fin de la Pobreza, Educación de Calidad, Igualdad de Género, Trabajo Decente y Crecimiento Económico, Industria de Innovación e Infraestructura, Alianza para Alcanzar los Objetivos, precisó.

La complementariedad entre el programa y los 17 DOS, deriva del trabajo, desarrollado en el marco de la iniciativa del Cenpromype, con miras al “fortalecimiento de la autonomía económica de las mujeres mediante la sistematización y la transferencia del servicio de empresarialidad femenina, generando un programa para la promoción de la igualdad de género y la autonomía económica de las mujeres en el ámbito empresarial”, explicó.

El plan es implementado en  cinco de los siete países del organismo integracionista – Belice, Costa Rica, Honduras, Panamá, República Dominicana (también lo integran El Salvador y Guatemala)-, de acuerdo con lo señalado en la información oficial.

“El programa de formación se ha implementado en (…) países que expresaron interés”, habiendo participado 610 mujeres, señaló, en un comunicado.

“Cuatro de (los) cinco países ya graduaron mujeres con modelos de negocios en un total de 370”, agregó,  además de informar que “ya se ha diseñado el manual de capital semilla y se ha iniciado su socialización con los países que han finalizado el programa de formación con las graduaciones de mujeres con planes de negocios”.

También señaló que, en los cinco países, “se ha hecho un levantamiento de lecciones aprendidas con equipos de los centros de atención y con mujeres atendidas”.

Durante la reunión que el Comité Directivo del Cenpromype llevó a cabo en junio, con integrantes de la Red Regional de Mujeres Mentoras (emprendedoras con experiencia), la directora ejecutiva del centro, la dominicana Miosotis Rivas, dijo que, “hace más de 10 años, nos dimos cuenta que el desarrollo de la Región SICA es posible, pero no sin mujeres”, razón por la cual “asumimos la Igualdad de Género como un eje transversal de la Agenda Regional MIPYME, y la empresarialidad femenina como un eje específico”.

Respecto a la agenda, la coordinadora regional de Empresarialidad Femenina del Cenpromype, expresó, en marzo de este año, que se trata de “construir todas las partes del modelo de empresarialidad femenina que favorece la autonomía económica”, para lo cual “vamos a capacitar a las mujeres para la toma de decisiones asertivas en el ámbito financiero”.

Con similar propósito, el Instituto Centroamericano de Administración de Empresas (Incae), y la empresa crediticia MasterCard, ofrecen, a nivel centroamericano, un programa denominado Leadership, Entrepreneurship, Advancement, Development, Sustainability (Liderazgo, Emprendedurismo, Avance, Desarrollo, Sostenibilidad, LEADS Mujer).

La iniciativa ofrece, a su seleccionada población meta –constituida por medianas empresarias-, capacitación, tutoría, acceso a fondos semilla, redes sociales para promover o consolidar esos negocios.

Cuarenta de esas emprendedoras completaron, en mayo de este año, la primera etapa del proceso, en la que fueron capacitadas en aspectos tales como emprendimiento, innovación, estrategias de crecimiento, liderazgo, entre otros temas, de acuerdo con la información proporcionada por los promotores de la iniciativa.

Del grupo inicial, una decena de empresarias fue seleccionada para la siguiente etapa, consistente en tutorías diseñadas para la implementación de proyectos estratégicos orientados, entre otros objetivos, a mejorar los respectivos planes de negocios, además de consolidar el impacto de cada empresa.

Las 30 emprendedoras quienes no fueron seleccionadas, pasaron a recibir asesoramiento en materia de proyectos para el crecimiento empresarial.

Respecto al plan de capacitación, el director académico de LEADS Mujer y profesor del INCAE, Roy Zúñiga, indicó que “todas las mujeres emprendedoras con las que hemos trabajado este año también merecen una alta distinción”, porque han superado “innumerables trabas  (…) en los ámbitos públicos y privados”, y “siguen luchando por salir adelante, generando empleos, pagando impuestos, cubriendo deudas y atendiendo a sus familias”.

Zúñiga reflexionó que, cada participante “tiene innumerables lecciones de vida.”, aseguró “MasterCard ha sido muy visionaria al apoyar de manera decidida a este grupo”.

Al respecto, Gabriel Balzaretti, el director general de MasterCard para Centroamérica, aseguró que, para la empresa, l iniciativa conjunta es “un modelo que busca fortalecer a las mujeres empresarias y aumentar su productividad”, aunque “también busca que, a través del acceso a plataformas tecnológicas de medios de pago electrónicos, se desarrollen capacidades comerciales, networking, tutorías y financiamiento”, con miras, asimismo, a aportar a la integración regional.

En coincidente reflexión, la directora ejecutiva del Cenpromype, considera que, en el marco de los “ideales integracionistas, no se puede hablar de desarrollo mientras la mitad de la población no está en las mismas condiciones que sus pares”, porque las mujeres constituyen “una fuerza relevante para la agenda integracionista del desarrollo” de los países integrantes del Sica.