La exposición a altos niveles de contaminación puede causar una variedad de resultados adversos para la salud.
La contaminación es la presencia en el ambiente de sustancias o elementos dañinos para los seres humanos y los ecosistemas (seres vivos). Existen diferentes tipos de contaminación, pero básicamente se pueden dividir en: contaminación del aire, contaminación de suelos (tierra) y contaminación del agua.
La contaminación está haciendo estragos en la salud de la población y recientemente se viene publicando que esos efectos dañinos también repercuten en el área reproductiva.
Así los estudios indican que la calidad del semen ha disminuido de forma considerable en los últimos años, al punto que se reporta que la tasa de fertilidad mundial ha caído hasta un 50% entre 1960 y el año 2016. Específicamente en los Estados Unidos se mantiene un 16% por debajo de lo que se precisa para mantener, como mínimo, estable la reproducción de la población.
Desde luego, esto varía de forma considerable de un país a otro y dentro de un mismo país varía dependiendo de la zona, es claro, que las grandes urbes, y los grandes centros poblacionales, son los más afectados, así como las zonas industriales.
Algunos reportes van más allá y sugieren que si este efecto nocivo se mantiene, en cuestión de cinco a diez años los hombres no serán capaces de producir esperma de calidad y hasta es posible que la supervivencia de la especie humana se vea amenazada.
Al día de hoy contamos con tratamientos muy efectivos que suelen permitir a muchos de esos hombres recuperar su normalidad, sin embargo, siempre hay un número de casos que no responde y se teme, que ese número vaya en aumento.
El verdadero problema es que el individuo promedio poco puede hacer por cambiar esa realidad, las verdaderas decisiones dependen de los grandes consorcios industriales.