Las mujeres y las niñas deben ser un sector poblacional prioritario en los planes de los gobiernos en materia de recuperación económica a causa de la pandemia del nuevo coronavirus, aseguró el secretario general de las Naciones Unidas, el portugués António Guterres.

Ello aportará a facilitar la recuperación de las economías nacionales, aseguró el funcionario, en un informe que dio a conocer un in forme que enfoca el impacto de la presente crisis sanitaria mundial en el sector femenino de la población.

“Poner a las mujeres y las niñas en el centro de las economías (nacionales) dará mejores y más duraderos resultados para todos, apoyará una recuperación más rápida y nos reencausará en el camino hacia la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles”, planteó Guterres, en el documento citado por ONU Noticias, la agencia informativa de Naciones Unidas, en un comunicado.

El funcionario aludió así a los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) -establecidos, hace casi cinco años, por Naciones Unidas, para cumplirse, a más tardar, para 2030-.

El quinto de los ODS -que están contenidos en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, aprobada en 2015 por la Asamblea General de las Naciones Unidas- se refiere, específicamente, a “Igualdad de Género”, y apunta a poner fin a todas las formas de discriminación contra las mujeres y las niñas, señalando, entre otros planteamientos, que ello no solamente constituye un derecho humano básico sino que es crucial para el desarrollo sostenible.

“Se ha demostrado una y otra vez que empoderar a las mujeres y niñas tiene un efecto multiplicador y ayuda a promover el crecimiento económico y el desarrollo a nivel mundial”, según lo indicado en ese punto.

En su más reciente informe sobre la incidencia de la Enfermedad Coronavirus 2019 (Coronavirus Disease 2019, COVID-19) –causada por el nuevo virus- en ese sector de la población mundial, el secretario general expresó preocupación por lo que definió, en el documento, como “la exacerbación de las inequidades sanitarias, económicas y de seguridad y protección social que de por sí sufren las mujeres y las niñas por el sólo hecho de pertenecer al género femenino”.

La COVID-19 “podría revertir los limitados logros en materia de igualdad de género y derechos de las mujeres”, vaticinó, como advertencia, el secretario general, quien agregó que, al enfocar en ellas los esfuerzos de recuperación, los gobiernos deben “reconocerlas como líderes (…) dándoles representación equitativa y poder de decisión”.

Guterres también señaló que una pandemia agudiza las desigualdades socioeconómicas, y, más aún, para los sectores más vulnerables, los que, por otra parte, son los menos atendidos en los planes de recuperación.

Al señalar que las mujeres y las niñas constituyen uno de esos estratos poblacionales, el jerarca de Naciones Unidas advirtió que, para ellas, “los impactos económicos serán más graves”, por tratarse de “quienes generalmente ganan menos dinero, ahorran menos y tienen trabajos inseguros o viven al borde de la pobreza”, de modo que, “poner a las mujeres en el centro de las economías dará mejores y más duraderos resultados para todos”.

En materia de desigualdad de género, al describir la presente situación a nivel mundial, ONU Noticias indicó, en el comunicado, que aproximadamente 60 por ciento de las mujeres se desempeña en la economía informal, además de que sus ingresos y sus posibilidades de ahorro son inferiores a las de la población masculina en ese sector.

“A esto se suma que el cierre de negocios (a causa de la pandemia) ha dejado a millones de mujeres sin trabajo”, informó, en el extenso texto.

“Por si fuera poco, la pandemia ha incrementado enormemente la violencia contra las mujeres”, denunció, para señalar que, de acuerdo con cifras de Naciones Unidas, “una de cada cinco mujeres fue víctima de violencia en el último año y muchas de ellas ahora están atrapadas en sus casas con sus verdugos”.

La agencia aludió así al hecho de que el aislamiento social –una de las medidas clave que los gobiernos están aplicando para tratar de controlar la propagación de la enfermedad-, obliga a numerosas mujeres en situación de violencia de género, a estar confinadas, 24/7, con sus agresores.

“Los servicios de asistencia para estos casos están sobrepasados y, además, están experimentando recortes y restricciones en sus presupuestos”, agregó.

Guterres se refirió, en este contexto, a su llamamiento de esta semana a todos los Gobiernos Al respecto, en su informe, Guterres reafirmó su exhortación de esta semana, a los gobiernos a nivel mundial, a proteger a las mujeres en esa situación.

Sobre ese fenómeno, el funcionario recibió, un día antes de dar a conocer el informe, una carta de 124 gobiernos de la Unión europea (UE), inform+ó, además, ONU Noticias.

En el texto, los gobiernos firmantes “manifiestan su compromiso con la prevención y el combate a la violencia de género como parte de esencial de la respuesta al COVID-19”, indicó la agencia.

“Nos comprometemos a prevenir y rectificar la violencia doméstica como parte de nuestras respuestas nacionales y globales, incluyendo garantizar que haya información disponible y que los servicios sean seguros y accesibles”, expresaron, además de plantear que, “más que nunca, necesitamos tolerancia cero para la violencia doméstica”.

“Las mujeres no sólo son víctimas. Desempeñan un papel crucial en la respuesta al COVID-19. Cerca del 70% del personal de salud en la línea de combate, así como en el área de trabajo social son mujeres”, además de que “cargan con una parte desproporcionada del trabajo no remunerado de cuidados de personas y son actores críticos del desarrollo sostenible en todos los países”, declararon.

“Los firmantes asumieron el compromiso de incluir a las mujeres en todas las decisiones para la respuesta y recuperación de la pandemia”, indicó ONU Noticias, in especificar qué autoridades europeas firmaron la carta a Guterres.