Disminuir el estrés, realizar actividades físicas, seguir al pie de la letra el tratamiento indicado y evitar la ingesta de cafeína y comida chatarra son pasos fundamentales para esta fase.

Para algunas es un alivio, para otras es un momento de angustia, lo cierto es que la menopausia es una fase que toda mujer experimentará y debe prepararse de la mejor manera para enfrentar los cambios.

Esteban Coto, médico internista, indicó que el climaterio, nombre con el que también se le conoce, es un cambio fisiológico natural y normal que conlleva modificaciones en los tipos y niveles de hormonas presentes en el cuerpo femenino al pasar a una etapa no reproductiva de la vida.

“Los síntomas pueden iniciar años antes del último período menstrual, en algunas mujeres hasta cinco años o más antes y varían de una a otra. Destacan periodos menstruales irregulares en tiempo y en volumen, sudores nocturnos, sofocamiento, insomnio, cambios e inestabilidad de ánimo (depresión, ansiedad o irritabilidad), fuertes latidos del corazón y dolores de cabeza, entre otros”, explicó.

La menopausia suele ocurrir entre los 45 y 55 años de edad, pero este rango puede variar gracias a factores como la herencia, edad en la que la madre tuvo la menopausia, cirugías, cantidad de embarazos y factores externos como uso prolongado de anticonceptivos. Se considera que la menopausia está establecida cuando la fémina no tiene una menstruación durante un año completo.

Tratamiento

Aunque es una etapa normal, es necesario acudir a consulta médica por dos motivos, primero para tratar los síntomas que causen molestias y segundo, prevenir las enfermedades que se pueden asociar a la disminución de hormonas.

El doctor Coto manifestó que entre las opciones terapéuticas se incluyen cambios en el estilo de vida de la persona, evitar la cafeína, el alcohol y el exceso de alimentos condimentados.

“Además, existen diversos fármacos que se utilizan de acuerdo con la presentación clínica particular de cada caso: terapia de sustitución hormonal oral, cremas hormonales tópicas, antidepresivos y ansiolíticos, medicamentos para controlar la osteoporosis y el riesgo de fracturas y fármacos para controlar los lípidos, niveles de moléculas grasas en sangre”, señaló.

El riesgo de enfermedades está latente, entre las más comunes destaca la osteoporosis, infartos, accidentes cerebrales vasculares y cáncer.

Adecuada nutrición

Esteban Coto declaró que se debe evitar la ingesta de cafeína, alcohol y comidas condimentadas, Ana Cristina Gutiérrez, asesora nutricional añadió que es importante consumir proteína para evitar la pérdida de masa muscular, disminuir la ingesta de dulces y postres, y controlar el peso regularmente.

Carol Palacios de Consultas Nutrición aconsejó las fuentes de calcio como la leche y yogurt descremado, queso bajo en grasa, vegetales de color verde como el brócoli, la mostaza china, espinacas, semillas como almendras, nueces, girasol, chia.

“La vitamina D interviene en la absorción del calcio, por lo que se recomienda aumentar su consumo como el huevo y pescado, también las frutas, vegetales y agua. Disminuir la ingesta de grasas saturadas (mantequilla, natilla, queso crema, o en carnes grasosas o fritas), azúcares simples (helados, reposterías, chocolates, etc)”, enfatizó Palacios.

Para Gutiérrez la actividad física es importante, pero en la intensidad que tolere e indique el médico, si es diario que no falle por nada del mundo, si es 3 veces por semana no importa pero que siempre sea constante.

De acuerdo con la experta, el ejercicio debe tener una combinación de fuerza muscular y aeróbico para que trabaje tanto  el corazón como el incremento o mantenimiento de masa muscular.