Escuchar y creer los relatos de las víctimas sobrevivientes, conocer los síntomas del maltrato, y enseñar a niños y adolescentes sobre el problema son algunos de los medios para aportar, eficazmente, a la violencia de género.
Al formular las recomendaciones, la Entidad de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU Mujeres) anunció la realización, a partir de esta semana, de la campaña anual de los 16 Días de Activismo contra la Violencia de Género (del 25 de noviembre al 10 de diciembre).
En un llamado a participar en la actividad mundial, la agencia especializada internacional enumeró una decena de acciones para, individual y colectivamente, lograr que los esfuerzos por frenar y erradicar esa enraizada manifestación de machismo agresor tenga particular fuerza en el presente contexto de la pandemia del nuevo coronavirus causante de la Enfermedad Coronavirus 2019 (Coronavirus Disease 2019, Covid-19).
“En 2020, la COVID-19 ha trastocado nuestras vidas en casi todos los sentidos y en todas partes”, señaló, en la extensa exhortación que difundió, el 17 de noviembre, titulada “Actúa: 10 maneras para contribuir a erradicar la violencia contra las mujeres, incluso durante una pandemia”.
“Los países han impuesto confinamientos y restringido la circulación de personas para contener la propagación del virus”, agregó, en alusión específica al aislamiento social
-cuarentena- implementado -en varios casos, obligatoriamente, con toque de queda incluido- por gobiernos a nivel mundial.
“A medida que se cerraban las puertas y se iniciaba el aislamiento, comenzaron a aumentar las denuncias de todas las formas de violencia contra las mujeres y las niñas, en particular la violencia en el ámbito privado”, denunció.
Sin embargo, la agresión de género ha sido históricamente habitual -y normalizada- en sociedades patriarcales entre cuyos usos sociales aceptados figuran las numerosas variantes de agresión contra adultas y menores de edad, conductas que cubren desde acoso sexual verbal hasta femicidio.
En este sentido, ONU Mujeres precisó que “la pandemia de la violencia contra las mujeres no es nueva. Incluso antes de la aparición de la pandemia de COVID-19, en todo el mundo 243 millones de mujeres y niñas habían sido maltratadas por sus compañeros sentimentales en el último año”.
Lo que ha ocurrido este año ha sido que “la pandemia de la COVID-19 ha intensificado la violencia, que se ha visto agravada por una reducción de los servicios de apoyo y del acceso a la ayuda”, puntualizó.
“En este momento en que conmemoramos la campaña anual de los 16 Días de activismo contra la violencia de género -25 de noviembre – 10 de diciembre-, ONU Mujeres se une a sobrevivientes, activistas, responsables de la toma de decisiones, el sistema de las Naciones Unidas y personas de todo tipo para destacar la necesidad de financiación, servicios esenciales, prevención y datos que propicien respuestas mejor fundamentadas”, expresó.
La agencia de Naciones Unidas aclaró que el combate al nocivo fenómeno machista es una tarea lo mismo individual que grupal, y ofreció la decena de acciones con ese objetivo.
“Poner fin a la violencia contra las mujeres es asunto de todas y todos”, planteó, en la exhortación, para, a continuación, detallar “diez maneras en que puedes lograr el cambio de forma segura y efectiva”.
Entre la principales, recomendó: “escucha y cree a las sobrevivientes”.
“Cuando una mujer comparte su historia de violencia, está dando el primer paso para romper el ciclo de maltrato”, por lo que “debemos garantizarle el espacio seguro que necesita para hablar y ser escuchada”, explicó.
También, precisó que “el autor es el único responsable de la agresión y debe asumir la responsabilidad por sí solo”, y recomendó, a continuación, “protesta contra la culpabilización de la víctima y haz frente a la idea de que las mujeres deben evitar situaciones que se perciban como ‘peligrosas’ según los estándares tradicionales”.
Es necesario, igualmente, sensibilizar a niños y adolescentes, planteó, asimismo.
“El ejemplo que damos a la generación más joven determina la manera en que ésta piensa sobre el género, el respeto y los derechos humanos”, de modo que “inicia conversaciones sobre los roles de género a una edad temprana y cuestiona los rasgos y las características tradicionales asignadas a hombres y mujeres”, recomendó.
“Señala los estereotipos a los que niñas y niños se enfrentan constantemente, ya sea en los medios de comunicación, en la calle o en la escuela (…) habla sobre el consentimiento, la autonomía física y la rendición de cuentas a niñas y niños, y escucha también lo que tienen que contar sobre su experiencia en el mundo”.
ONU Mujeres también llamo a asumir y exigir responsabilidad ante el problema.
Para ello, es necesario denunciar comportamientos machistas agresivos -silbidos, comentarios sexuales inapropiados, los chistes sexistas, entre otros-, además de promover un ambiente laboral más seguro para las trabajadoras, mediante propuestas de reflexión respecto a comportamientos tóxicos, entre otras acciones.
Igualmente, exhortó a identificar indicios de maltrato, y señaló que las diferentes formas de violencia de género, seriamente, afectan, lo mismo física que emocionalmente, a las víctimas.
Al respecto, en su sitio en Internet, ONU Mujeres enumera las principales características que suele presentar la conducta personal de las víctimas de agresión de género.
Entre otros indicios de maltrato en una relación, la agencia señaló, principalmente, “parecer tener miedo de su pareja o mostrarse ansiosa por complacerla, evita las ocasiones de socializar, especialmente con el sexo opuesto y es posible que tenga limitaciones para visitar a la familia/amigas y amigos”.
Asimismo, que la agredida “tiene que explicar/inventar excusas para justificar el comportamiento posesivo de la pareja y siempre pide permiso para hacer cosas está como absorta cuando la pareja entra en la estancia”.
Igualmente, “mostrar cambios en la personalidad, la conducta o la apariencia física se siente deprimida, ansiosa o con tendencias suicidas y expresa odio por sí misma o vergüenza”, además de que “sufre cambios de ánimo, por ejemplo, llora de repente o tiene crisis de ira”, o “le da miedo que la gente la toque y evita el contacto visual”.
También, “dejar de atender las necesidades mentales, emocionales, físicas y espirituales”, o “pierde interés en aficiones, actividades y en el ejercicio”, con la posibilidad adicional de que “empieza a consumir sustancias ilegales o alcohol”, lo mismo que “muestra un cambio en las pautas de sueño y apetito”.
ONU Mujeres también ofreció una lista de números telefónicos de emergencia, en decenas de países, tanto para víctimas como para quienes las ayudan y necesitan mayor orientación.
Es posible acceder, a la nómina, al final de la página virtual ubicada en: https://www.unwomen.org/es/what-we-do/ending-violence-against-women/faqs/signs-of-abuse.
La anual campaña internacional 16 Días de Activismo contra la Violencia de Género -que viene llevándose a cabo desde 1991, tiene inicio el 25 de noviembre -Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer-, y se extiende hasta el 10 de diciembre -Día de los Derechos Humanos, de acuerdo con la descripción oficial.
Según lo indicado por ONU Mujeres, “se trata de una estrategia implementada por personas y organizaciones de todo el mundo, a fin de exigir la prevención y eliminación de la violencia contra las mujeres y niñas”.