Los menores de edad que sufren este tipo de abuso enfrentan un alto riesgo de sufrir traumas a largo plazo, desarrollar problemas de salud mental, baja autoestima, comportamientos autodestructivos

 

La explotación sexual infantil es una forma aberrante de abuso y violencia que afecta a millones de niños en todo el mundo. Consiste en utilizar a menores de edad con fines sexuales, lo cual incluye la producción, distribución y consumo de material pornográfico infantil, así como la trata de niños con fines sexuales.

Esta cruel práctica suele ser perpetrada por personas inescrupulosas que buscan lucrarse o satisfacer sus deseos sexuales a expensas de la vulnerabilidad de los niños. Los perpetradores pueden ser proxenetas, traficantes, pedófilos, turistas sexuales, entre otros.

La explotación sexual infantil tiene consecuencias devastadoras para las víctimas, tanto a nivel físico como emocional y psicológico. Los niños que sufren este tipo de abuso enfrentan un alto riesgo de sufrir traumas a largo plazo, desarrollar problemas de salud mental, baja autoestima, comportamientos autodestructivos y dificultades para establecer relaciones saludables en el futuro.

Afortunadamente, hay organizaciones y agencias gubernamentales dedicadas a combatir la explotación sexual infantil y brindar apoyo a las víctimas. También se enfoca en concienciar a la sociedad sobre la importancia de proteger a los niños y denunciar cualquier sospecha de abuso.

Es crucial que todos trabajemos juntos para erradicar este horrible crimen y proteger los derechos y la dignidad de los niños en todo el mundo. Si tienes conocimiento o sospechas de algún caso de explotación sexual infantil, es importante denunciarlo a las autoridades competentes para que puedan tomar medidas y proteger a los niños afectados.

Más información: Cel: 506 -8404-6772