Fuente: Noticiero FGER Maya K’at

La intención del derechista presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, de eliminar la Secretaría Presidencial de la Mujer (Seprem), reduciéndole el rango al de comisión, está generando preocupación y rechazo.

De concretarse, la opción, mencionada por Giammattei, al reciente inicio de su administración (2020-2024), sería violatoria de compromisos asumidos, a nivel internacional, por país centroamericano, de acuerdo con los planteamientos contrarios a la desaparición de la Seprem.

Al informar sobre el tema, la Oficina del alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh) indicó, el 19 de junio, que expertas de la organización mundial se declararon preocupadas por lo que definieron como el retroceso que, la medida, implicaría.

Las expertas, del Grupo de Trabajo sobre la Discriminación contra Mujeres y Niñas, “hoy expresaron su preocupación sobre la propuesta de sustituir la institución de más alto rango sobre los derechos de las mujeres”, indicó la Oacnudh.

También, “llamaron al Gobierno a mantener sus compromisos internacionales en materia de derechos humanos sobre la igualdad de género”, agregó.

El reemplazo de la Seprem “por una Comisión interinstitucional de menor rango (…) según las expertas, socavaría el cumplimiento” de lo establecido en la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (Convention on the Elimination of All Forms of Discrimination against Women, Cedaw), y de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), señaló.

La convención y el Comité sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (Comité CEDAW), entre otros instrumentos internacionales, “instan a los Estados a crear instituciones y mecanismos nacionales de alto nivel, eficaces, dotados de recursos suficientes, para el adelanto de la mujer, y la incorporación una perspectiva de género en las políticas gubernamentales”, precisó.

La Cedaw fue aprobada el 18 de diciembre de 1979, por la Asamblea General de las Naciones Unidas, y está vigente desde el 3 de setiembre de 1981.

Por su parte, los ODS, contenidos en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, aprobada en 2015 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, consisten en 17 metas -incluida la igualdad de género- a cumplirse, a más tardar, para 2030.

Opuesta a la intención de Giammattei -quien, al igual que sus principales colaboradores, se ha abstenido de formular declaraciones formales, a medios de comunicación, al respecto-, una de las expertas citadas por la Oacnudh, la presidenta del grupo de trabajo, Elizabeth Broderick, aseguró que la Seprem “ha tomado el liderazgo para asesorar y coordinar las políticas públicas para la igualdad entre hombres y mujeres y ha jugado un papel fundamental en los últimos 20 años para la protección y promoción de los derechos de las mujeres en el país”.

La creación de la Seprem es uno de los resultados de la firma de la paz que, en Guatemala pudo fin a 36 años de guerra interna (1960-1996), en el marco del Procedimiento para Establecer la Paz Firme y Duradera en Centroamérica, que también determinó el fin de las confrontaciones internas en El Salvador (1980-1992) y Nicaragua (1982-1990).

Junto con El Salvador y Honduras, Guatemala integra el Triángulo Norte de Centroamérica, considerado como una de las regiones más violentas e inseguras, a nivel mundial, situación que golpea, con particular intensidad, a las mujeres y las niñas de esos tres países.

Ese contexto está en el origen de la masiva migración de ciudadanos de los tres países, hacia Estados Unidos, incluidos menores quienes, por falta de recursos de sus mayores, se desplazan no acompañados por adultos.

En su sitio oficial en Internet, se indica que la Seprem “es el mecanismo al más alto nivel del Organismo Ejecutivo para el avance de las mujeres”, y que “es el producto de la demanda del movimiento de mujeres del país, de los compromisos derivados de la firma de los Acuerdos de Paz y de la adopción y ratificación de instrumentos internacionales por el Estado de Guatemala”.

En ese sentido, Broderick advirtió que “sustituir la institución por otra de menor rango contradice los compromisos internacionales de Guatemala en materia de derechos humanos, y es un paso hacia atrás respecto al cumplimiento del ODS no5 sobre la igualdad de género y el ODS no16 sobre instituciones fuertes”.

El quinto de los 17 ODS, se refiere, específicamente, a “Igualdad de Género”, y apunta a poner fin a todas las formas de discriminación contra las mujeres y las niñas, señalando, entre otros planteamientos, que ello no solamente constituye un derecho humano básico sino que es crucial para el desarrollo sostenible.

“Se ha demostrado una y otra vez que empoderar a las mujeres y niñas tiene un efecto multiplicador y ayuda a promover el crecimiento económico y el desarrollo a nivel mundial”, según lo indicado en ese punto.

Entretanto, en el ODS 16, titulado “Paz, justicia e instituciones sólidas”, se plantea que “los conflictos, la inseguridad, las instituciones débiles y el acceso limitado a la justicia continúan suponiendo una grave amenaza para el desarrollo sostenible”.

En el caso de la Seprem, “el Comité CEDAW ha recomendado a Guatemala que reforzara la institución, otorgándole el rango de ministerio, y un proyecto de ley para elevar la institución está pendiente de aprobación en el Congreso desde el 2016”, indicó la Oacnudh.

Al respecto, Broderick expresó que “lamentamos que no haya habido voluntad política para adoptarlo y que al contrario, se anuncie el reemplazo por una institución de menor rango”.

Por otra parte, “estamos en un momento en el que, ahora más que nunca, las guatemaltecas necesitan instituciones fuertes, que permitan la inclusión de una perspectiva de género en las respuestas a la crisis y las políticas públicas”, agregó.

La presidenta del grupo de trabajo hizo, así, referencia a la afectación que está causando, en Guatemala, la pandemia mundial de la Enfermedad Coronavirus 2019 (Coronavirus Disease 2019, Covid-19) -con 12, 509 casos registrados, al 19 de junio, según datos de la estadounidense Universidad Johns Hopkins-.

«Alentamos al gobierno a que consulte las organizaciones nacionales de mujeres, para entender mejor las necesidades de las mujeres del país», agregó la experta.

Coincidentemente, Lily Caravantes, María Gabriela Núñez, Ana Leticia Aguilar, y Yolanda del Rosario Sian, exhortaron, el 12 de este mes, a Giammattei, a fortalecer a esa institución, en lugar de eliminarla.

“Como extitulares de la institución hacemos un llamado al presidente Dr. Alejandro Giammattei para dialogar sobre las rutas de su fortalecimiento como asesora y coordinadora de políticas, a fin de cumplir con las metas de gobierno y la promoción del desarrollo de Guatemala”, plantearon, en un comunicado.

“Le instamos a garantizar su permanencia y fortalecimiento en el Organismo Ejecutivo y le solicitamos propiciar un amplio espacio de diálogo, que incorpore a diversos actores sociales y políticos en la discusión”, agregaron, en el texto de siete párrafos.

También hicieron referencia a que “expertas del Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW) de Naciones Unidas han reiterado, en sus recomendaciones al Estado, la necesidad de fortalecerla”.

En ese sentido, reafirmaron que, “como extitulares exhortamos al presidente Dr. Alejandro Giammattei a reconsiderar la decisión acerca de la permanencia de la SEPREM como la institucionalidad única para el avance de las mujeres al más alto nivel del Estado guatemalteco”.