Las denuncias por violencia de género, durante 2020, en Honduras llegaron a casi cien mil, -lo que proyecta un promedio mensual apenas por debajo de doscientos setenta-, indicó, en declaraciones reproducidas por el diario local Tiempo, la consultora de derechos de las mujeres Honorina Rodríguez.

El año pasado cerró con 98 mil casos puestos en conocimiento de autoridades judiciales y policiales, cifra que, estimada a lo largo del año, indica aproximadamente 269 incidentes por mes, de acuerdo con los datos mencionados por Rodríguez.

Entre los delitos más frecuentes, figuran acoso y abuso sexual, trata de mujeres, violación, precisó la experta, quien indicó, asimismo, que la mayoría de las denuncias se canalizó por la vía del telefónico Sistema Nacional de Emergencias 911, y, en menor medida, los casos fueron presentados, por las víctimas, en instalaciones judiciales.

“Esto debe llamar a la reflexión, a las autoridades, porque este universo de denuncias son las mujeres que pudieron hacerlo”, aclaró.

“Sin embargo, hay muchas más que no tienen acceso para denunciar”, precisó, a continuación, en alusión a la considerable cifra oculta que existe en el campo de la agresión de género.

Ante ese cuadro de situación, Rodríguez exhortó, por una parte, a las autoridades, “a que se organicen con el propósito de ofrecer respuestas contundentes a este flagelo”, de modo que “detengan la violencia contra las mujeres”, y, por la otra, a las hondureñas, a “no callar la violencia”.

“Se alcanzan niveles alarmantes”, en materia de agresión de género, reflexionó, en alusión al hecho de que la violencia -de diversa índole- constituye la realidad cotidiana que las mujeres enfrentan en el contexto de elevado machismo que caracteriza a la sociedad del país centroamericano.

Datos publicados, el 4 de enero, por el periódico, acompañando las declaraciones de Rodríguez, indican que medidas tales como el aislamiento social -cuarentena- impuestas por el gobierno, en respuesta a la pandemia mundial del nuevo coronavirus, dispararon las situaciones de agresión contra mujeres y niñas.

“En los últimos meses, tras confinamiento y emergencia sanitaria nacional (…) las cifras de violencia contra la mujer se fueron en aumento”, indicó, sin proporcionar cifras comparativas.

Sin embargo, “según datos oficiales del Juzgado de Violencia Doméstica de Tegucigalpa (la capital nacional), desde el inicio del confinamiento el pasado 16 de marzo del 2020, únicamente un total de 1258 denuncias fueron interpuestas ante la justicia”, informó.

“De esa cifra, 259 denuncias las interpusieron en el Juzgado, personalmente las víctimas”, mientras “las restantes 999 denuncias, fueron remitidas por el Ministerio Público y la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) a la entidad judicial”, agregó.

En cuanto a la noroccidental ciudad de San Pedro Sula -principal centro industrial maquilador textil, y uno de los conglomerados urbanos más violentos del país-, Tiempo -que se edita en ese lugar- indicó que “solamente el 2.5 por ciento de las víctimas, denuncian judicialmente a su agresor”.

Además de los delitos mencionados por Rodríguez, el femicidio es el más brutal componente de la agresión de género que se registra en Honduras, país integrante, junto con El Salvador y Guatemala, del Triángulo Norte de Centroamérica -una de las regiones más violentas, en términos generales, a nivel mundial-.

Al respecto, según los números más recientes del Observatorio de Derechos Humanos de las Mujeres, unidad de investigación social del no gubernamental Centro de Derechos de Mujeres (CDM), los femicidios que contabilizó, al cierre del año pasado, llegaron a 240, lo que significó una leve baja respecto a los 314 que correspondieron a 2019.

Los meses de 2020 con los mayores índices de estos asesinatos fueron febrero y setiembre, con 30 cada uno, seguidos por abril y octubre (29 en cada caso), y enero (24), según los cálculos del observatorio, que basa sus estimaciones en datos que obtiene de los medios de comunicación.

Para 2019, las cifras mensuales fueron, en general superiores, con la mayor incidencia machista criminal contabilizada en abril, que registró 42 femicidios, además de agosto (41), así como junio y diciembre (39 cada uno).