Con una voz de rebeldía y feminista escribió obras que iban en contra de la norma de la sociedad y los convencionalismos de su época.

Julia Constancia Burgos García1​ (17 de febrero de 1914 – 6 de julio de 1953), conocida como Julia de Burgos, nacida en Carolina, Puerto Rico es considerada por muchos críticos como la más excelsa poetisa nacida en Puerto Rico.​ Fue también partidaria de la independencia de la isla de los Estados Unidos.

Julia de Burgos se crio en Santa Cruz, pueblito humilde de la localidad de Carolina. Esto no la privaría de desarrollar su amor por la naturaleza y por su país. Siendo la mayor de todos, fue la primera de trece hermanos que cursara estudios universitarios.

Obtuvo su título de magisterio en la Universidad de Puerto Rico a los 19 años de edad, pero su amor por la literatura la llevó a escribir poesía. Posibles influencias en su obra serían Luis Llorens Torres, Luis Pales Matos, Clara Lair, Rafael Alberti y Pablo Neruda. También fue maestra en la escuela Feijoo del Barrio Cedro Arriba en Naranjito.

En 1936 se unió a «Hijas de la libertad», rama femenina del Partido Nacionalista de Puerto Rico. Este grupo político, liderado por Pedro Albizu Campos, promovía el ideal de independencia.

Burgos publicó tres colecciones de poemas. Para sus dos primeros libros viajó por la isla, dándose a conocer y organizando sus propios recitales. Su tercer libro fue publicado póstumamente en 1954.

Se casó con Rubén Rodríguez Beauchamp, y nuevamente —en 1944, en Nueva York— con Armando Marín, pero su gran amor fue el historiador, médico y político dominicano Juan Isidro Jimenes Grullón, nieto del extinto presidente dominicano Juan Isidro Jimenes.​ Este amor le inspiraría muchos de sus poemas. Su ánimo fue bajando y cayó en el problema de alcoholismo. El 6 de julio de 1953 se desplomó sobre una acera neoyorquina y murió de pulmonía en un hospital del barrio de Harlem, Nueva York a la edad de 39 años. Debido a que nadie reclamó su cuerpo y a que no llevaba ninguna identificación, la ciudad la enterró bajo el nombre de «Jane Doe». Algunos de sus amigos, capaces de rastrearla y encontrar su tumba, reclamaron su cuerpo. Sus restos fueron enviados a Puerto Rico. Fue solemnemente enterrada en Carolina y se elevó un monumento en el lugar del sepelio.

Entre los trabajos destacados de Julia de Burgos se encuentran: «Río Grande de Loíza», «Poema para mi muerte», «Yo misma fui mi ruta», «Alba de mi silencio» y «Alta mar y gaviota».

Vivió dos años en Cuba, que quedan registrados en la correspondencia de la poeta con su hermana. En La Habana estudió griego, latín y Francés.

Feminista

Julia de Burgos, además de mostrar el sentimiento de amor en sus poemas, también estimuló en las mujeres la liberación femenina. Julia de Burgos fomentó en sus años la verdadera mujer puertorriqueña a través de sus poemas donde plasmó los problemas de las mujeres de su país. Con una voz de rebeldía y feminista escribió obras que iban en contra de la norma de la sociedad y los convencionalismos de su época. Obras muy estudiadas por Julia de Burgos han sido destacadas por el alzamiento feminista que trae en sus versos. Un ejemplo de una obra muy estudiada: «Yo misma fui mi ruta» que trata sobre la liberación femenina. En este poema De Burgos se muestra decidida a ser quien maneja su vida. Aquí se expresa en desacuerdo con los mandatos de la sociedad. Este poema exhortó a las mujeres de la generación del 30, quienes se hallaban en una lucha de poder por sus derechos, que tuvieran conciencia de tres factores muy importantes: su potencial como mujer, el manejo de sus propias vidas y no sentirse inferiores.

Homenajes

El 19 de febrero de 1987 el Departamento de Español del Recinto de Humacao de la Universidad de Puerto Rico la homenajeó concediéndole un póstumo doctorado Honoris Causa en Letras y Humanidades. La proclamación fue presentada a su sobrina, María Consuelo Sáez Burgos.

La ciudad de San Juan ha homenajeado su memoria nombrando escuelas y avenidas en su nombre. Existe también en San Juan la «Casa Protectora Julia de Burgos», que protege a mujeres sobrevivientes de violencia doméstica, y el Museo de Artes y Ciencias Julia de Burgos. La ciudad de Nueva York la ha homenajeado también con un «Centro Latino Julia de Burgos» en Manhattan y un «Centro de Arte Julia de Burgos» en Harlem, cercano al lugar de su muerte.