
El crédito es fundamental en cualquier economía, como factor propulsor del desarrollo y fortalecimiento de la actividad empresarial.
En Costa Rica el 93% del parque empresarial está constituido por Mipymes, las cuales el año anterior generaron el 31% del empleo en el país, de acuerdo con el V Informe del estado de la situación pyme 2016 en Costa Rica. Por sector, el 57% de todas las Pymes son de servicios, 32% de comercio y 11% de industria.
Según el Ministerio de Economía, Industria y Comercio entre las Mipymes, la mayoría son microempresas (70%), mientras que las medianas representan el 16% y las pequeñas el 14%.
Este sector que mueve la economía tiene una importante representatividad de mujeres, especialmente jefas de familia, las cuales necesitan el acceso al crédito real para desarrollarse y fortalecerse.
La Cámara de Comercio de Costa Rica, CCCR, en el documento de reactivación económica que presentó recientemente en conferencia de prensa, propone medidas importantes de acceso al crédito, que beneficiará tanto a hombres como a mujeres, entre las que se encuentran estimular la colocación de crédito y utilizar los recursos de Sistema de Banca para el Desarrollo, SBD.
En cuanto a las estimulación del crédito proponen permitir a los bancos públicos, por una única vez, la posibilidad de vender cartera vencida a terceros con descuento, de manera que sea una medida temporal para mejorar indicadores y disminuir provisiones; disminuir por espacio de 24 meses, la tasa activa de los préstamos vigentes relacionados con PYMES, siempre y cuando esta disminución en colones no sea inferior a la TBP + 375 puntos base (p.b) y en dólares no sea inferior Prime Rate + 250 p.b.
También considera importante conceder para las pymes un periodo de gracia extraordinario de 24 meses, en el cual solo cancelen intereses en los créditos vigentes y establecer programas especiales en colones para la adquisición de la primera vivienda, construcción de la primera vivienda o adquisición de lote por primera vez para construcción, estableciendo tasas fijas (no menores al mínimo establecido en ítems anteriores) y periodos de gracia, mínimo de 36 meses.
Por último y no menos importante, la CCCR recomienda crear programas especiales en colones para proyectos de desarrollo inmobiliario (vivienda y comercial) y para proyectos productivos y de servicios, estableciendo tasas fijas (no menores al mínimo establecido en ítems anteriores) y periodos de gracia, mínimo de 36-60 meses.
En cuanto a utilizar los recursos del SBD, la Cámara recomienda flexibilizar las condiciones para otorgar los préstamos, con el objetivo de brindarle capital de inversión a los emprendimientos y a las micro, pequeñas y medianas empresas.
El SBD es una banca de segundo piso, que ofrece apoyo a las empresas a través del impulso con financiamiento, garantías y apoyo empresarial a proyectos para que las empresas se promocionen con éxito.
Según datos del periódico La Nación, durante el año 2018, se colocaron ¢180.893 millones en préstamos, lo cual significó una reducción del 13% con respecto a los ¢209.602 millones del año 2017.