Ser madre no debe ser tarea fácil, más aún cuando se tienen los hijos después de los 40 años, sin embargo para Lorena ser mamá a esta edad no fue una tragedia, más bien la inyectó de vida.
Expertos, ginecólogos y la Asociación Americana de Medicina Reproductiva, indican que la edad idónea y fértil de la mujer para tener hijos, va entre los 20 a los 35 años, esto debido a los riesgos a los que se pueden ver afectados tanto la madre como el bebé.
A la edad de 40 años, la probabilidad de una mujer para quedar embarazada es inferior al 5% por ciclo; por lo tanto, se espera que menos de 5 de cada 100 mujeres tengan éxito al intentarlo, así lo indica la Asociación.
La pérdida de la fertilidad femenina relacionada con la edad, se debe a que tanto la calidad como la cantidad de óvulos disminuyen gradualmente.
En el caso de tener un hijo después de los 40, los peligros se incrementan, la mujer y su criatura pueden llegar a presentar complicaciones obstétricas como: aborto espontáneo, las cromosomopatías y malformaciones, la diabetes gestacional, los estados hipertensivos del embarazo, la placenta previa, el parto de pre término y el desprendimiento prematuro de placenta, así lo menciona el doctor Miguel Torres, con base en un estudio donde se analizaron 24.032 casos de gestantes de 40 años o más.
Para la psicóloga Heysy Altamirano, el tema de la autoestima en las mujeres al quedar embarazada después de los 40 años, en vez de ser negativa, en su gran mayoría es muy satisfactoria, ya que son realmente muy pocas las desventajas, a partir de esta edad suelen gozar de mayor tranquilidad espiritual derivada de su experiencia de la vida, por lo tanto es un tiempo de plenitud en el que están más satisfechas de lo que quieren y cómo enfrentarse a nuevos retos, incluida la maternidad.
La excepción de la regla
Lorena Villareal, tuvo su quinto hijo a los 41 años, después de que sus otros retoños estuvieran grandes y hasta la hicieran abuela, fue una noticia que no se esperaba, sus hijos mayores los tuvo cuando tenía entre los 20 y 24 años, incluso a los 35 pensó en operarse, pero por esas cosas de la vida y porque según como dice ella “Dios tenía dispuesto otra cosa”, no pudo suceder.
Cuando se dio cuenta que estaba embarazada, fue donde su médico y éste le dijo que estaba presentando un aborto. Preocupada y sin saber qué hacer, el doctor le dijo que esperara, que la naturaleza era sabia y gracias a Dios su niño se formó bien y llegó a buen término.
Fue así como 17 años después de su último embarazo, nació Sebastián y hoy a sus 53 años no ha terminado la tarea de criar a su hijo.
Aunque le indicaron los posibles riesgos en su salud arriba mencionados, esta mamá no presentó absolutamente nada, lo que considera que fue un embarazo y un parto normal como los que había tenido anteriormente.
«Nunca sentí miedo, ni me sentí frustrada, seguro por eso me fue tan bien, lo único que me hacía sentir extraña fue que mi nieta nació primero que mi hijo, una situación “vacilona” comentó doña Lorena.
Villareal asegura que Sebastián la rejuveneció, “cuando ya me empezaba a sentir vieja y pensaba que ya lo había hecho todo, vino él a cambiar mi rutina de vida, ya mis hijos mayores trabajaban y eran más independientes, él llegó a retomar mis energías, revivió parte de mí que estaba como muerta”.
Considera que tener hijos a edad madura no es trágico, ya que más bien se está más relajada “de joven yo corría y me estresaba más, todo era nuevo y mucha gente como mi mamá, suegra y otros querían estar encima de uno diciéndole cosas, con él ya no, con el paso del tiempo uno aprende”, indicó.
Otra de las cosas que rescató como positivas de ser madre a esta edad, es que a su hijo menor pudo amamantarlo por casi 3 años, mientras que recuerda que a sus hijos mayores apenas 40 días (sonríe).
Hoy por hoy al ver a su hijo entrar a la adolescencia, la preocupación que siente es que su esposo está apunto de pensionarse y es consiente que deben guardar una reserva para sus estudios que aún le falta bastante por recorrer.
¿Cómo me verá Sebas? es la única pregunta que me hago, ¿Me verá «vieja» en comparación a las mamás de sus compañeritos? Es cómico que voy con mi hija a las reuniones de padres de familia de la escuela, y sé que incluso ella va a terminar esa etapa un poco antes que yo, puntualizó.
El qué dirán
Para la Profesional en psicología, si una mujer a esta edad está contenta y con una actitud positiva de recibir a su bebé con todo el amor, el único interés que podría tener es el de cuidarse y protegerlo, el qué dirán no le preocuparía para nada.
Villarreal asegura que nunca le importó lo que la gente pensara, “fue vacilón explicarle a la familia que estaba embarazada, pero al final las personas lo tomaron bien. Uno tiene que aprender a escuchar comentarios, en estos países esto se ve mal, sin embargo en Europa es muy normal, solo que aquí aún no aterrizamos”.
Igual esta madre consideró que los extremos no son buenos, debe haber una edad promedio, es bueno realizarse primero como mujeres, ser mamá joven y madre madura tienen cosas buenas, pero debe existir un balance, acentuó.
A las mujeres que están en un caso como el que estuve, les digo que no tengan miedo, es solo una persona que viene a despertarla y a decirle que usted está viva y que aún puede dar vida, finalizó.
knunezpetra@gmail.com
Fotografía: Lorena con dos de sus hijos, el mayor y Sebas el menor.