El 9, virtualmente ninguna se movió.
Tal como estaba previstos, las mujeres se mantuvieron masivamente ausentes de calles, medios de transporte público, instalaciones estatales, tiendas, restaurantes, en respuesta a la convocatoria denominada “¡El nueve ninguna se mueve!”, para protestar contra la violencia de género, en particular, los femicidios.
También descrita como “#undiasinnosotras”, la acción se constituyó en un paro de género, a nivel nacional, que incluyó, además, áreas tan variadas como la educación y la diversión nocturna.
Numerosos centros educativos de niveles primario y secundario, permanecieron cerrados.
El metálico portón de una escuela capitalina, lucía un aviso, según el cual “la Secretaría de Educación Pública a través de la Autoridad Educativa Federal en la Ciudad de México, confirma su respeto y solidaridad con las mujeres que han expresado su intención de participar en el movimiento del 9 de marzo”.
De modo que “se valora y se determina la suspensión de clases”, de acuerdo con lo indicado.
El paro nacional se sintió en actividades tales como el trabajo periodístico.
Esto se evidenció, por ejemplo, en la matutina conferencia de prensa que desarrolla, cotidianamente, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador –popularmente conocido como AMLO, por sus iniciales-.
Las periodistas asistentes a la actividad informativa gubernamental constituyen aproximadamente la mitad de la treintena de reporteros que habitualmente dan cobertura a esas declaraciones del mandatario, pero el 9 de marzo, las colegas presentes fueron solamente seis.
El sector del espectáculo nocturno, que cuenta con un alto número de trabajadoras, también se vio afectado.
En la ciudad de Guadalajara, la capital del occidental y costero estado de Jalisco, las bailarinas –pole dancers- de dos clubes nocturnos -“Candy’s” y “La Casa de George”- se sumaron a la protesta, y los propietarios de ambas instalaciones las apoyaron.
En redes sociales señalaron que “apoyamos la igualdad, el respeto y la integridad de las mujeres mexicanas”, y en mantas colocadas en el frente de los establecimientos, informaron a sus clientes que “nos unimos a la causa 9-Marzo-2020 No abrimos”.
Entretanto, las trabajadoras de servicios esenciales para la población, desempeñaron labores, como habitualmente, y, en el caso de las integrantes de fuerzas policiales, agregaron, a su uniforme, un pequeño lazo púrpura –el color con el que se identificó el movimiento.
La iniciativa –promovida por la organización feminista Brujas del Mar- se originó en la tendencia ascendente que presenta la violencia contra las mujeres, en México, en particular los femicidios.
Dos de los más recientes femicidios, ocurridos en febrero, en el lapso de aproximadamente dos días, conmocionaron a la sociedad mexicana, por la particular brutalidad que implicaron.
En el primer caso, la víctima, identificada como Ingrid Escamilla, de 26 años, fue asesinada, a puñaladas, por su pareja, de 46, con particular brutalidad, y, en el segundo, trató de una niña de siete años, identificada como Fátima.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, 976 femicidios fueron registrados el año pasado, lo que superó los 891 que correspondieron a 2018.
Por su parte, y ante la ausencia de cifras oficiales más actualizadas, organizaciones de derechos humanos han indicado que, en lo que va de este año, se tiene registrados algo más de 260 femicidios -cometidos, en 20 casos, contra menores de 14 años-.
Según números de organizaciones feministas y agrupaciones defensoras de los derechos humanos, el promedio de femicidios, en México, es de 9 a 10 por día.
El paro también se llevó a cabo en protesta contra la desigualdad de género, lo que afecta a las mujeres en diferentes campos, incluidos el laboral, el político, el empresarial.
Asimismo, se cumplió un día después de las masivas manifestaciones llevadas a cabo, también a nivel nacional, para conmemorar el Día Internacional de la Mujer.
La idea, respecto a ambas actividades, consistió en contrastar la multitudinaria participación de mujeres en la primera, y la ausencia de mujeres, de actividades y lugares, en la segunda.
“¡El nueve ninguna se mueve!”, indicó la convocatoria al paro, difundida en redes sociales, y agrega “#undiasinnosotras”, además de anunciar “paro nacional”, lo que implica “ni una mujer en las calles, ni una mujer en los trabajos, ni una niña en las escuelas, ni una joven en las universidades, ni una mujer comprando”.
De acuerdo con datos oficiales, la población de México se ubica en aproximadamente 125 millones –casi 64 millones de los cuales son mujeres-, y la población de 15 años –edad mínima legal para trabajar- o más, se estima en algo más de 93 millones –casi 49millones de los cuales son mujeres, y de éstas, cuatro de cada 10 integran la fuerza laboral o procuran trabajo-.
El paro apunto, entre otros objetivos, a destacar la importancia de la población femenina en la economía mexicana.