El hecho de que el ya bajo número de alcaldesas fue aún más reducido en las elecciones municipales del fin de semana en Costa Rica, refleja una forma de violencia que implica la ausencia de reconocimiento al aporte político de las mujeres.

Al denunciar esa situación, en una declaración oficial, la ministra de la Condición de la Mujer y directora ejecutiva del Instituto Nacional de las Mujeres (Inamu), Patricia Mora, aseguró que los resultados de la votación municipal llevada a cabo el 2 de este mes en el país centroamericano son motivo de preocupación.

En tal contexto, Mora indicó que, junto con dirigentes de más de una veintena de organizaciones defensoras de los derechos de las mujeres, firmó una declaración para exigir, entre otros puntos, que los partidos políticos implementen disposiciones vigentes, de modo de garantizar la plena participación política femenina.

“Estamos enfrentando una violencia estructural que considera que las mujeres aún no tenemos nada que aportar”, lo que se refleja en el hecho de que los números de la jornada cívica del fin de semana indican que “únicamente un 11 por ciento de los puestos de mayor nivel –las alcaldías- han sido ocupados por mujeres”.

Esos “resultados electorales (…) nos han dejado una enorme preocupación”, y “nosotras, desde el Inamu, junto con veinticinco organizaciones de mujeres de todo el país, estamos exigiéndole, al Estado -en primera instancia, al Tribunal Supremo de Elecciones-, que cumplan con la normativa de la paridad y de la alternancia”, dijo.

La ministra aludió así a disposiciones contenidas en la legislación vigente en la materia, que apuntan a la equidad tanto en el número de candidatas y candidatos a cargos de elección popular como en la ubicación, en las papeletas de votación, en posiciones con verdadera posibilidad de elección sin perjuicio de género.

Mora informó que, además, en el texto que firmó junto con las organizaciones, se incluyó la exigencia, “a los partidos políticos”, de “que garanticen, a las mujeres, su plena participación electoral, y política en general”.

La funcionaria formuló las declaraciones al tiempo que el Inamu difundió el pronunciamiento, en el cual las firmantes precisaron que, si bien el número de cantones (municipios) pasó, desde las elecciones pasadas (2016), de 81 a 82, el número de alcaldesas se redujo, en el mismo período, de 12 a nueve, según datos preliminares del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).

“Es claro que se mantienen las condiciones adversas y prácticas patriarcales, incluidos (…) retrocesos en derechos políticos y de acceso a la participación electoral” lo que limita “la participación política de las mujeres y el cambio cultural para alcanzar una sociedad más democrática”, denunciaron las 26 firmantes del texto de casi dos páginas.

“Ciertamente, cuanto más alta la jerarquía del puesto de elección al que se aspira, menos posibilidades tienen las mujeres de resultar ganadoras”, precisaron.

Ante ello, “Costa Rica requiere más que el compromiso histórico de las mujeres para fortalecer nuestra democracia”, lo que significa que “necesitamos que el Estado en su conjunto ponga en práctica los compromisos suscritos a nivel nacional e internacional”, agregaron.

Al respecto, explicaron que “el fin último que inspira el principio de paridad y el mecanismo de alternancia siempre ha sido la igualdad efectiva en todos los puestos, que solamente puede garantizarse con reglas claras”.

A manera de ejemplo, mencionaron el hecho de que la implementación de tales normas permitió que, en la Asamblea Legislativa (parlamento unicameral, de 57 integrantes), la proporción de diputadas pasó de 19 (45 por ciento), en el período pasado (2014-2018), a 26 en el actual (2018-2022).

También plantearon que “Exigimos un compromiso contundente y efectivo del Estado costarricense, incluido el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), así como de los partidos políticos, para garantizar la efectiva participación y representación de las mujeres en los puestos de mayor poder, así como espacios de participación política libres de toda manifestación de violencia por la condición de género”.

Con miras a aportar a los esfuerzos por cerrar la brecha de género que mantiene, a las mujeres, sin posibilidad de participar plenamente en política, y en el marco del proceso electoral municipal culminado el fin de semana, el Inamu y el Programa de las Naciones Unidas Para el Desarrollo (PNUD), lanzaron, el 2 de octubre, una campaña para promover, en CostaRica, la plena participación femenina en actividades políticas.

Denominada “La igualdad abre caminos”, la campaña consistió en una serie de cuatro videos que, respectivamente, daban a conocer los derechos políticos de las mujeres, el significado de la paridad en materia de cargos de elección, los beneficios de la autonomía política de las mujeres, el combate a la violencia política en el proceso con miras a la reciente votación municipal.

La iniciativa respondió a la alarma generada por la marcadamente baja proporción de alcaldías encabezadas por mujeres –en ese momento, 14 por ciento de las entonces 81municipalidades a nivel nacional-.

Al conceptualizar la campaña, la representante residente auxiliar del PNUD en Costa Rica, Kryssia Brade, explicó entonces, a Petra, que, de acuerdo con un cálculo del Foro Económico Mundial, el cierre de la brecha, a nivel global, puede insumir 202 años.