“Darle este espacio a la madre es reconocer el doble trabajo que tenemos cuando somos madres. Apoyar la lactancia materna es apoyar la vida, por lo que aplaudimos estas iniciativas”. Waleska Porras, Presidenta de la Liga de la Leche Costa Rica.
Amamantar es un acto natural y es el único alimento que recibe un bebé durante los primeros seis meses de vida, en ocasiones la tarea se vuelve un poco difícil ya que no hay muchos espacios donde hacerlo, es por ello que la Municipalidad de San José, en conjunto con la empresa Plycem, lanzaron la iniciativa “Amamantar es construir con amor” y presentaron cuatro módulos para la lactancia.
Las estructuras cuentan con una banca donde las mamás podrán sentarse tranquilas a descansar y dar de pecho, además tienen cambiadores por si necesitan revisar el pañal o limpiar al pequeño.
Los módulos estarán ubicados en cuatro puntos estratégicos: Hospital Calderón Guardia, Hospital Nacional de Niños, Hospital México y Municipalidad de San José, la razón es porque aunque son sitios de mucho tránsito, tienen vigilancia permanente, lo que puede evitar algún daño a la infraestructura.
Paula Vargas, Vice Alcaldesa de la Municipalidad de San José, agradeció el apoyo de la empresa privada e invitó a más ayuntamientos a unirse: “es muy importante contar con este tipo de alianzas y abrir más espacios para que las madres puedan amamantar a sus hijos en un ambiente seguro”.
Waleska Porras, Presidenta de la Liga de la Leche Costa Rica, comentó que en nuestro país, pese a toda la protección jurídica que se tiene, la licencia de lactancia a veces se queda corta: “darle este espacio a la madre es reconocer el doble trabajo que tenemos cuando somos madres, apoyar la lactancia materna es apoyar la vida, por lo que aplaudimos estas iniciativas”.
En 2007, la Caja Costarricense del Seguro Social realizó un estudio llamado “Situación en Costa Rica de lactancia materna, según Encuesta Nacional de hogares y propósitos múltiples INEC-2006”, el 95,8% de los niños eran amamantados.
Beneficios para la salud
Dar de pecho es un acto natural, para las madres primerizas en ocasiones es muy doloroso ya que el pequeño puede romper el pezón y causar alguna herida.
El bebé que es amamantado en sus primeros seis meses será un niño sano, menos propenso a alergias, crea con su madre un vínculo muy fuerte, aumenta las defensas, disminuye el riesgo de obesidad, desnutrición, reduce la mortalidad infantil, entre otros.
Por su parte la madre mitiga el riesgo de padecer depresión post parto, disminuir el sangrado post parto, de padecer anemia y evitar en un alto porcentaje el riesgo de cáncer de mama, de ovario y cérvix.
Marcela Zárate, coordinadora de la Clínica de la Lactancia y Desarrollo del Hospital México, expresó que son pocos los casos en que la lactancia está contraindicada: “primero hay que tomar en cuenta que amamantar es una decisión de la madre, hay que respetar eso y en cuanto a condiciones médicas pues que tenga SIDA, sea VIH positivo, lleve un tratamiento de quimioterapia, un cáncer activo, que ingiera algún medicamento incompatible, pero en realidad son muy pocas las situaciones médicas que hacen que una madre no pueda dar de pecho”.
Existe la creencia popular que hay mujeres que no producen leche, Zárate desmiente esta versión y asegura que la fémina necesita estar tranquila, comer, descansar, disfrutar ese proceso y que su entorno familiar y social la apoye.
En esta etapa es indispensable que la madre se hidrate, ya que al estar dando pecho perderá líquidos, por lo que tiene que reponerlos, no hay una dieta específica, solo aumentar la ingesta de proteínas y carbohidratos.
La doctora Zárate fue enfática en no recomendar el uso de chupones, pezoneras, beberitos ni chupetas: “cuando el niño mama baja la lengua y succiona, cuando usa alguno de estos lo que hace es subirla, el dar de pecho dura unos 25 minutos, con el chupón ese tiempo se reduce, entonces el niño se confunde en tamaño, en la forma de colocar la lengua, en el volumen que le llega y los músculos que mueve para tomar del chupón y para mamar son diferentes, entonces el reflejo natural lo va perdiendo”.
Respecto al tiempo, la Organización Mundial de la Salud dice lactancia exclusiva es de 0 a 6 meses y la ablactación, que es la incorporación de los alimentos, es después de los 6 meses, aquí se combina comida y pecho.
Legislación
El artículo 95 del Código de Trabajo establece que “la trabajadora embarazada gozará obligatoriamente de una licencia remunerada por maternidad, durante el mes anterior al parto y los tres meses posteriores a él. Estos tres meses también se considerarán como período mínimo de lactancia, el cual, por prescripción médica, podrá ser prorrogado (…)”
Esta licencia de lactancia comprende los meses que el médico especialista recomienda como necesarios para este tipo de alimentación y la madre debe presentarle a su patrono un dictamen médico.
El artículo 100 del Código también señala que donde laboren más de 30 mujeres se debe construir o adecuar una sala de lactancia, sin embargo pocas empresas lo cumplen.
Es importante indicar que el patrono no puede despedir sin causa justa a una mujer embarazada o en periodo de lactancia.
Los módulos están construidos con tecnología de fibrocemento que brinda frescura, confort y es amigable con el medio ambiente
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