De acuerdo con los más recientes datos del observatorio -correspondientes al período enero-marzo de 2024-, la violencia machista cobró la vida a 66 mujeres

Honduras está en situación crítica en materia de femicidios, con más de sesenta asesinatos de mujeres registrados solamente en el primer trimestre de 2024.

Se trata del país latinoamericano con el más elevado número de tales crímenes, contexto en el cual la impunidad constituye un componente clave.

Al analizar, el 24 de abril, la situación del país centroamericano en esta materia, la representante de Naciones Unidas en Honduras, la italiana Alice Shackelford, expresó, en diálogo con periodistas, preocupación por el hecho de que la sociedad normaliza la violencia de género.

Por su parte, citada, el mismo día, por la Agence France Presse (AFP), Migdonia Ayestas, directora del Observatorio de Derechos Humanos de las Mujeres, perteneciente al no gubernamental Centro de Derechos de Mujeres (CDM), dijo, que el contexto de agresión femicida marca odio y desprecio contra las mujeres.

De acuerdo con los más recientes datos del observatorio -correspondientes al período enero-marzo de 2024-, la violencia machista cobró la vida a 66 mujeres.

La más brutal manifestación de machismo agresor registró, en 2022, a nivel nacional, 297 casos, cifra que se disparó a 386, en 2023.

En lo que tiene que ver con 2024, durante el primer trimestre, los índices más críticos correspondieron a enero y a marzo, con 26 cada mes, mientras febrero presentó 14.

Shackelford advirtió que “estamos en emergencia”.

“Con los números que estamos teniendo, en términos de femicidios, muertes violentas de mujeres, estamos en situación alarmante”, denunció.

La funcionaria internacional indicó que, en tal contexto, “preocupa la normalización de la violencia y la impunidad en torno a las muertes violentas de mujeres”.

En ese sentido, planteó que “las organizaciones de mujeres, refiere que los principales obstáculos son la capacidad de investigación”, así como la limitación en materia de “herramientas y tecnologías para facilitar el proceso”.

Al respecto, la plataforma informativa hondureña Criterio.hn indicó, el 24 de abril, que “las organizaciones de mujeres refieren que la impunidad, en 2023, alcanzó un 98%”.

“Un análisis de datos de Crierio.hn señala que las estadísticas relativas a la violencia de género, ponen de relieve la urgencia de acciones concretas para abordar la impunidad y garantizar la protección de las mujeres”.

La misma fuente reveló, a manera de ejemplo, que “entre enero y noviembre de 2023 ingresaron, a los Jugados de Letras de lo Penal, 127 casos de delitos contra la vida de las mujeres, contrastado con el ingreso del Tribunal de Sentencias, que fueron 72 casos, de los cuales 61 tuvieron una resolución”.

En coincidencia con la funcionaria de Naciones Unidas, Ayestas dijo, a la AFP, “es una emergencia nacional, que maten a una mujer”, y agregó que, en Honduras, “hay un grave problema”.

“La data sólo cuenta a las que perdieron la vida, sin contar a las mujeres que han resultado lesionadas”, precisó, para reafirmar que “la violencia física, psicológica, y sexual es una preocupación.

Según la jerarca del CDM, “la violencia de género, en Honduras, se encuentra arraigada en una compleja red de factores sociales, económicos, y culturales”.

Se trata de aspectos “que van desde la desigualdad de género hasta la impunidad y la falta de recursos para combatir este flagelo”, puntualizó.

Sumado a ello, “la discriminación y la falta de oportunidades, para las mujeres, contribuyen a perpetuar un ciclo de violencia que parece no tener fin”, reflexionó.

Sobre ese cuadro de situación, la experta destacó la potencial incidencia de la educación como herramienta en el combate a la agresión machista.

Ayestas aseguró que “la emergencia por la violencia femicida, se origina porque no se han establecido acciones para prevenir la violencia, y enseñar, a los hombres, a que no sean violentos ni a ejercer los tipos de violencias”.

Foto: Александр