El confinamiento -en varios países, obligatorio, y en algunos casos, impuesto mediante toque de queda- por el virus causante de la Enfermedad Coronavirus 2019 (Coronavirus Disease 2019, Covid-19), obliga a mujeres y a niñas a permanecer en sus hogares, que no siempre son lugares seguros para ellas, señaló Kidman, en un artículo de opinión difundido por ONU Mujeres.
La cuarentena por la pandemia mundial del nuevo coronavirus dispara, exponencialmente, los casos de violencia de género, al tiempo que la capacidad de refugios y otros servicios de apoyo, para sobrevivientes, se ve superada, advirtió la actriz cinematográfica australiana Nicole Kidman, quien es, además, embajadora de buena voluntad la Entidad de las Naciones Unidas para Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU Mujeres).
Las llamadas a líneas telefónicas de emergencia se quintuplicaron al inicio de la emergencia sanitaria estallada en marzo del año pasado, indicó.
“Se estima que, cada tres meses de continuación de la cuarentena, 15 millones de mujeres, alrededor del mundo, son afectadas por violencia, mientras los servicios de apoyo, consejo, y refugio para sobrevivientes verán superada su capacidad”, informó.
Al respecto, la actriz hizo alusión al hecho de que, paralelamente a la dramática situación sanitaria mundial, “una pandemia se ha desarrollado en la sombra: violencia contra las mujeres”.
En ese sentido, señaló que “las llamadas a líneas (telefónicas) de ayuda hasta se quintuplicaron durante las primeras semanas de la pandemia”, y denunció que, de ese modo, “un problema que ya estaba generalizado antes de que la Covid-19 golpeara (…) se tornó aún más apremiante”.
“Imagínense cómo es la vida de las mujeres y las niñas quienes, como todos nosotros, tienen que protegerse en casa para estar seguras frente a la Covid-19, cuando la casa, en sí misma, no es un lugar seguro” sino “donde se las ataca, abusa, manipula, o se está constantemente vigilada por padre o miembros de la familia”, reflexionó.
Kidman precisó, además, que, en el contexto de la pandemia, la violencia de género, en términos amplios, se ha disparado, en el ámbito global.
“Junto con el abuso doméstico, ha habido un aumento en todos los tipos de violencia”, lo que incluye “desde hostigamiento en las calles casi vacías, hasta ciberbullying, hasta las niñas quienes, por las crecientes cargas financieras, fueron retiradas de la escuela y obligadas a casarse”, continuó denunciando.
A manera de confesión, la actriz expresó que, durante los catorce años que viene desempeñándose como representante de la agencia especializada de Naciones Unidas, ha tenido conocimiento de la magnitud de la agresión de género.
“Como embajadora de buena voluntad de ONU Mujeres, desde 2006, he aprendido mucho sobre la terrible extensión de la violencia contra las mujeres, alrededor del mundo, y visto su impacto devastador”, escribió, para agregar que, “cuando primero escuché que una de cada tres mujeres y niñas experimentan violencia a lo largo de su vida, me sentí completamente impactada”.
En opinión de Kidman, la erradicación de la violencia de género es una responsabilidad colectiva -de la sociedad a nivel mundial-, lo que implica asumir una actitud comprensiva.
“Todos tienen un papel que desempeñar, y el poder de contribuir, para terminar con la violencia contra mujeres y niñas, aún durante esta pandemia”, comenzó a plantear.
“Empieza por escuchar, creer a las sobrevivientes”, recomendó, para señalar que, “cuando alguien dice que fue atacada, su sobriedad, ropa y sexualidad son irrelevantes”.
“Aun pequeñas acciones como señalar comportamientos tóxicos en un amigo, o compartir información en una conversación en grupo, por ejemplo, pueden ayudar mucho”, sugirió.
“Habiendo crecido con una madre feminista, nunca imaginé que yo podría estar en desventaja porque nací niña”, pero “hoy, como madre, sé lo importante que es nutrir la autoestima, cuestionar estereotipos y discriminación, y dar el ejemplo a la generación más joven”, reflexionó.
“Tenemos que empezar a tener tempranas conversaciones, en casa, sobre papeles de género, y hablar con nuestros niños y niñas sobre consentimiento, autonomía corporal, responsabilidad”, continuó recomendando.
En la visión de Kidman, “la violencia contra mujeres y niñas ya estaba extendida antes de la pandemia”, pero “que la sobreviva, o no, depende de todos nosotros”.