Esta técnica permite aplicar altas dosis en el tejido mamario mientras se reducen las dosis a otros órganos, a las pacientes se les coloca unos lentes de realidad virtual, donde pueden seguir el procedimiento indicado por los médicos especialistas.
Un novedoso tratamiento para combatir el cáncer de mama logra reducir hasta en un 8% los posteriores efectos secundarios que podrían afectar el corazón y los pulmones de las pacientes que reciben radioterapia.
La se llama “control del movimiento en tiempo real” y se realizará en el Centro de Radioterapia Siglo XXI. Según Julio Argüello, oncólogo y especialista en radioterapia, ya tienen a una primera paciente a la cual se le aplicará este procedimiento, que se basa en la respiración.
La meta es lograr la máxima separación de la mama con el corazón y la irradiación se llevará a cabo solo cuando la paciente esté en el punto máximo de inspiración. Esto permite aplicar altas dosis en el tejido mamario mientras se reducen las dosis al corazón y los pulmones.
“Hemos visto el impacto que tiene la radioterapia en el control del cáncer de mama, pero también existe un riesgo potencial de daño cardiovascular y básicamente lo que hace esta técnica es que el paciente inspire de forma un poco más profunda y despejar algunas áreas a la hora de aplicarles los haces de radiación”, manifestó Argüello.
Para llevar a cabo la nueva modalidad de tratamiento, a la paciente se le da un seguimiento de su respiración y aunado a esto, se le coloca en el pecho un sensor infrarrojo para monitorizar la fase y amplitud respiratoria.
Con la ayuda de unos lentes de realidad virtual, que se le coloca a la paciente a la hora del tratamiento, se envía una señal del ciclo respiratorio para que así́ la persona pueda visualizarlo y los especialistas regular al tratamiento.
La inspiración permite que el corazón se desplace un poquito para atrás y la pared del tórax, que es donde está la mama, se haga hacia delante y quede así un espacio para que los haces de radiación toquen las zonas afectadas y no la pared del corazón. Lo que se necesita es que la paciente tenga una buena condición, que pueda inspirar fuertemente y sostener entre 15-20 segundos.
Este tipo de tratamiento, utilizando los lentes de realidad virtual, también se puede aplicar en pacientes con cáncer de pulmón o que padezcan daños en la zona abdominal.
En Costa Rica, el cáncer de mama sigue siendo el primero en mortalidad, con una tasa de 10,39 por cada 100 mil mujeres, el autoexamen es la herramienta principal de detección, además del ultrasonido y la mamografía.
Jorge Isaac Rojas, físico médico del Centro de Radioterapia Siglo XXI, le coloca a una paciente los lentes de realidad virtual, previo a que empiece a realizársele el tratamien.
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Por Alejandra Madrigal Ávila
