Los casos de agresión por motivo de género se disparó en un sesenta por ciento, en el marco del aislamiento social –una de las medidas clave que la mayoría de países implementa para tratar de contener la Enfermedad Coronavirus 2019 (Coronavirus Disease 2019, COVID-19)-, y, si esa medida se mantiene vigente durante seis meses más, los casos de esa violencia, a nivel mundial, llegarían a más de treinta millones, según cálculo de una agencia especializada de Naciones Unidas.

En tal contexto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que se apresta a difundir una guía en apoyo a las víctimas de ese fenómeno social machista.

Además, Naciones Unidas anunció apoyo financiero para organizaciones de mujeres, principalmente aquellas ubicadas en países que, aparte de la pandemia mundial de la Covid-19, venían siendo escenario de conflicto armado u otras situaciones de crisis.

Según cifras del Fondo de Población de las Naciones Unidas (United Nations Population Funda, Unfpa), el alza global de los incidentes de violencia de género, en el marco del aislamiento social, ha sido de 60 por ciento, además de que el número de llamadas a líneas de emergencia, para denunciar casos o solicitar ayuda, aumentó cinco veces, informó el jefe de la oficina de la OMS para Europa, el médico belga Hans Kluge.

“Esto es inaceptable”, planteó Kluge, en conferencia de prensa llevada a cabo el 8 de mayo.

Sumado a ello, “Si los confinamientos continuasen durante seis meses, tendríamos que esperar 31 millones de casos de violencia de género más, en todo el mundo”, advirtió.

“Las evidencias muestran que la violencia interpersonal aumenta durante cualquier emergencia”, aclaró, por lo que, en el caso de la presente pandemia, los gobiernos nacionales tendrían que considerar que, proporcionar los servicios de ayuda pertinentes, constituye su obligación moral.

Ante el alza exponencial de los casos de violencia de género, las personas deben, como medida preventiva, mantenerse en contacto, ya sea mediante mensajes de texto en redes sociales o por la vía telefónica, dijo Kluge, quien subrayó: “estén en contacto”.

Además, siempre en el plano preventivo, la OMS se apresta a difundir una guía para proporcionar asistencia a quienes están en situaciones de violencia de género, informó el funcionario, quien destacó, además algunas medidas que diferentes gobiernos –principalmente europeos- vienen implementando.

En ese sentido, en Italia se creó una aplicación móvil mediante la cual es posible que las víctimas soliciten ayuda sin tener que realizar una comunicación telefónica, dijo.

También indicó que, en España y en Francia, las agredidas cuentan con programas de denuncia que permiten, a trabajadores farmacéuticos, mediante palabras clave dichas por las víctimas, poner en marcha mecanismos de protección.

De acuerdo con recientes versiones periodísticas, en Sudamérica, similar programa está en marcha en Argentina.

Por su parte, la Entidad de las Naciones Unidas para Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (Onu Mujeres) anunció que estará apoyando financieramente a organizaciones de mujeres, a nivel mundial, en particular las que operan en países donde la pandemia se ha sumado a situaciones de crisis –conflictos armados u otros contextos de emergencia- existentes cuando se generó la emergencia sanitaria mundial.

Se trata de dos acciones cuyos medios de canalización de fondos serán el Fondo para la Mujer, Paz y Acción Humanitaria, y el Fondo de las Naciones Unidas para Combatir la Violencia contra la Mujer, indicó Onu Mujeres, en un comunicado.

Las iniciativas permitirán, respectivamente, aportar fondos a organizaciones de mujeres en 25 países que, a nivel global, venían siendo escenario de conflicto armado u otra crisis, además de apoyar, con respaldo, entre otros socios estratégicos, de la Unión Europea (UE), a organizaciones en los países de África Subsahariana, agregó.

Se trata –según definición del Programa de las Naciones Unidas para el desarrollo- de 46 de los 54países de África, una veintena de los cuales –principalmente los ubicados en la región del Desierto del Sahara- ha sufrido total o parcial desertificación.

“Estas organizaciones hacen una contribución extraordinaria a la sociedad, ya sea en la respuesta a la violencia generalizada contra las mujeres o con problemas específicos que mujeres y niñas sufren en zonas de conflicto”, dijo, citada en el comunicado, la directora ejecutiva de ONU Mujeres, la docente sudafricana Phumzile Mlambo-Ngcuka.

Organizaciones como las de derechos de las mujeres son parte de la primera línea de combate a la Cvid-19, aseguró la funcionaria -una ex vicepresidenta (2005-2008) sudafricana.

Respecto a la violencia de género en el marco de la pandemia, y a la decisiva participación de mujeres en las acciones enmarcadas en la presente emergencia sanitaria mundial, los subsecretarios generales de las Nacionales Unidas Natalia Kanem y Mark Lowcock, advirtieron, recientemente, que, además de la pandemia del Covid-19, la humanidad está ante otra epidemia que debe superar: la violencia y la inequidad de género.

Los funcionarios formularon ese planteamiento, en una declaración conjunta difundida, el 10 de mayo, por el Unfpa.

Kanem es una médica panameña quien, simultáneamente se desempeña como directora ejecutiva del Unfpa, mientras Lowcock, un economista británico, es, además, coordinador de Asistencia de Emergencia de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (UN Office for the Coordination of Humanitarian Affairs, Ocha).

“Mientras el mundo combate la pandemia de Covid-19, sabemos que tenemos otra epidemia que superar: la violencia perpetrada contra las mujeres, y las desigualdades que las dejan más propensas a vivir en pobreza y sin acceso a servicios esenciales”, indicaron, en la declaración.

“Sabemos que los encierros y las cuarentenas son esenciales para la supresión de la Covid-19”, agregaron, para advertir que tales medidas –implementadas por la mayoría de los países afectados por la pandemia- pueden atrapar a las mujeres con parejas abusivas“.

“Las pasadas semanas, ha habido un dramático salto en los incidentes de violencia doméstica denunciados en muchos países”, en algunos de los cuales “el número de mujeres quienes llaman solicitando servicios de apoyo se ha duplicado”, denunciaron en el texto de una veintena de párrafos.

Respecto a las labores clave que mujeres, a nivel mundial, vienen desempeñando en el contexto del combate a la pandemia, Kanem y Lowcock escribieron que se trata de “extraordinarias acciones de personas que pueden cambiar la trayectoria de toda una nación”.

Esas mujeres integran el personal en la primera línea de respuesta, señalaron, para agregar que, “globalmente, la mujeres son 70 por ciento de la fuerza de trabajo en salud”, además de que desempeñan “la mayoría de los papeles de cuido en hogares y en comunidades”.

“Las mujeres hacen este trabajo esencial sin perjuicio de obstáculos y desigualdades”, plantearon, en la declaración titulada “Respuesta global a COVID-19 debe atender derechos y necesidades de mujeres y niñas” (“Global response to COVID-19 must address rights and needs of women and girls”).

“Es por eso que nuestro actualizado Plan Global de Respuesta Humanitaria (Global Humanitarian Responde Plan, Ghrp) para combatir el coronavirus, publicado el 7 de mayo, tiene en su corazón a las mujeres”, indicaron.