Estos países nórdicos apostaron por la igualdad salarial entre jugadores y jugadoras de sus selecciones.

En la segunda mitad del pasado año 2017, trascendió la noticia de que la selección femenina de fútbol danesa se negaba a jugar el partido amistoso que le correspondía contra Holanda, en protesta contra la marcada diferencia salarial de las futbolistas en comparación al de los hombres.

Los jugadores masculinos se mostraron dispuestos a reducir sus salarios para así poder casi duplicar el salario que ganaban las mujeres.

Poco tiempo después, Noruega se comprometió también a alcanzar tal logro. Conscientes de la necesaria causa, los jugadores de la selección noruega aceptaron el rebajo de sus sueldos en pos de aumentar el de las mujeres; hoy ganan lo mismo.

Federaciones de futbol de distintos países han prometido promover la igualdad salarial entre sus jugadores y jugadoras, aunque van a un paso un poco más lento; sus esfuerzos todavía no han podido igualar a los de estos países nórdicos.