Las monjas deben combatir los tratos abusivos que reciben de parte de sacerdotes, planteó el papa Francisco.
Algunas religiosas son sometidas a situación de servidumbre, como parte de ese contexto de violencia de género, de acuerdo con lo indicado, por el pontífice argentino, en un video difundido por el Vaticano.
Al respecto, la historiadora italiana Lucetta Scaraffia, plantea que el estado de cosas persiste porque las denuncias de las víctimas no son seriamente tomadas en cuenta.
En referencia al tema, la agencia noticiosa Agence France Presse (AFP) informó, el 9 de febrero, que Francisco “instó a las monjas a ‘luchar’ cuando ‘son injustamente tratadas, incluso dentro de la Iglesia’, tras reconocer que algunas son ‘reducidas a servidumbre’ por responsables religiosos”.
«Las invito a luchar cuando son tratadas injustamente, incluso dentro de la Iglesia, cuando su servicio, tan noble, se reduce a servidumbre, aun por parte de hombres de la Iglesia», expresó el papa, citado por el medio de comunicación francés.
De acuerdo con la versión periodística, “en el video (…) el Papa agradece la misión y la valentía de las mujeres religiosas y consagradas, al tiempo que pide rezar por ellas ‘para que sigan encontrando nuevas respuestas frente a los desafíos del tiempo actual’”.
AFP indicó, además, que, “en varias ocasiones Francisco ha denunciado la ‘esclavitud’ y ‘la violencia’ que sufren las mujeres dentro de la Iglesia”.
También ha “criticado la tendencia de algunos jerarcas, entre ellos cardenales y miembros de la Curia Romana, de emplearlas para el servicio doméstico”, agregó la agencia informativa europea.
En este sentido, el medio de comunicación igualmente citó a Scaraffia quien, además, dirigió la revista religiosa Donne Chiesa Mondo (Mujeres Iglesia Mundo) del diario vaticano L’Osservatore Romano.
En declaraciones a la AFP, Scaraffia aseguró que “son mujeres que trabajan como sirvientas” de sacerdotes, obispos, o cardenales, quienes las emplean para “cocinar, limpiar, lavar la ropa”.
Sumado a ello, “están mal pagadas”, expresó.
La agencia indicó, asimismo, que, en esa revista del periódico italiano, Scaraffia denunció que “es considerado normal en la Iglesia: las mujeres deben servir sin pedir nada a cambio”.
En un artículo de opinión publicado el 16 de enero de 2021, en el diario español El País, la historiadora explicó un aspecto clave del problema.
“Mientras no se tomen en serio, se investiguen y se juzguen las innumerables denuncias de abusos sexuales cometidos por sacerdotes y religiosos contra mujeres, que la justicia eclesiástica considera simples transgresiones del voto de castidad y define absurdamente como ‘relaciones románticas’, las mujeres nunca serán respetadas”, advirtió.
“Porque la negación de estas denuncias significa negar valor a la palabra de las mujeres y, por tanto, una falta total de respeto hacia ellas”, puntualizó.
También planteó que “escuchar a las mujeres y respetarlas solo puede lograrse mediante el reconocimiento de estas víctimas”.-