El gobierno, escocés dio un paso sin precedente, en materia de salud sexual y reproductiva, al poner en vigencia legislación que determina la gratuidad de los productos para menstruación
Al hacerlo, el 15 de agosto, aseguró que Escocia se convirtió en el primer país, a nivel mundial, que cuenta con una ley en ese sentido.
Se trata de la «Ley de productos para la menstruación» (“Period Products Act”) , que fue aprobada, unánimemente, en 2020, por el parlamento escocés.
Al respecto, la legisladora centroizquierdista Monica Lennon aseguró que el ejemplo del país europeo -que es parte del Reino Unido- será seguido por diferentes naciones.
Entre otras disposiciones, la ley señala que, en el contexto institucional, los gobiernos municipales -lo mismo que centros comunitarios, escuelas, universidades- deben proporcionar, sin costo, esos artículos, en sus respectivos baños.
Una aplicación para telefonía móvil, ayuda a ubicar el lugar más cercano donde se puede acceder a tales productos.
En declaraciones a periodistas, poco después del anuncio gubernamental de que la legislación entró en vigencia, la secretaria de Justicia Social de Escocia, Shona Robinson, dijo que “proporcionar acceso gratuito a productos para menstruación es fundamental para la igualdad y la dignidad…y elimina las barreras financieras al acceso”, precisó.
“Esto es más importante que nunca, en un momento cuando las personas están enfrentadas a la difíciles opciones”, a causa de elevados precios, “y no queremos que nadie esté en la posición de que no pueden tener acceso a productos para menstruación”, argumentó.
Por su parte, Lennon, legisladora por el socialdemócrata Partido Laborista Escocés (Scottish Labour Party), quien introdujo el proyecto de ley en el Parlamento Escocés (Scottish Parliament), se declaró “orgullosa de lo que hemos logrado en Escocia”.
“Somos los primeros, pero no seremos lo últimos”, aseguró Lennon, quien, como parte de la promoción de la iniciativa, llevó a cabo una campaña concientizadora contra lo que definió como “pobreza menstrual” -la ausencia de dinero para adquirir esos productos-.
Entretanto, Georgie Nicholson, directora de Hey Girls (Eh, Muchachas) -una oenegé británica que también promovió la gratuidad de esos artículos-, dijo, a la emisora British Broadcasting Corporation (BBC), que un estudio realizado por esa organización reveló que una de cada cuatro escocesas había experimentado, en algún momento, “pobreza menstrual”.
“Hay una manera muy simple de describir la pobreza de la menstruación: vas al supermercado, y tienes que elegir si puedes comprar una bolsa de pasta o una caja de tampones”, puntualizó, para agregar que “es así de básico”.
“Escuchamos, de muchas madres, que se quedan sin su protección para el período, para poder alimentar a sus hijos, y usan cosas como periódicos metidos en calcetines o pan (…) porque son más baratos que los tampones y las toallas sanitarias”, agregó, citada en la nota informativa que, publicada el 16 de agosto, la BBC tituló “Escocia se convierte en el primer país del mundo donde los productos para la menstruación son gratis”.
En opinión de Nicholson, la nueva ley constituye “un hito realmente enorme”.
Foto: Cliff Booth