Utilizar la cosmética natural tiene múltiples beneficios entre los que se destacan la obtención de productos prácticos, saludables y económicos.

En la constante búsqueda de la belleza, una de las principales preocupaciones de la mujer es su rostro, y el objetivo es que siempre luzca joven e iluminado. Sin embargo, en ocasiones nuestro presupuesto no alcanza para optar por algún tratamiento estético, por lo que los productos naturales pueden convertirse en el mejor aliado para su belleza y su billetera.

De acuerdo con Guadalupe Brenes, esteticista profesional y propietaria de Estética Mystique, utilizar la cosmética natural tiene múltiples beneficios entre los que destacan la obtención de productos prácticos, saludables y económicos; además, con ellos se evitan problemas de la piel ya que se previene algún tipo de alergia por las sustancias químicas con la que se elaboran los productos cosméticos artificiales.

También es importante considerar que los productos naturales presentan ciertas desventajas como su textura, pues en ocasiones no es la deseada y llega a ser muy espesa o muy líquida para el uso deseado. También, al no contener conservantes, una vez hechas las mascarillas deben utilizarse de forma inmediata y completa porque tienen una duración menor y son sensibles a la proliferación de bacterias.

Conocidas las ventajas y desventajas de las mascarillas naturales, es importante que usted conozca cuáles ingredientes pueden generarle algún tipo de reacción, por ejemplo, existen mujeres que son alérgicas a las semillas, fresas, limón o al banano.

“Las mascarillas naturales siempre van a ser aliadas para nuestro rostro, pues como mujeres deseamos tenerlo iluminado, sin excesos de grasa y que luzca joven, pero es indispensable conocer cuáles son las idóneas para nosotras, porque no siempre el mismo tratamiento nos sirve a todas”, indica Brenes.

La especialista en belleza nos explica cuál es la forma correcta de aplicar la mascarilla:

  • Primero limpie su rostro con ingredientes como el pepino, aceite de oliva o avena, con el objetivo de retirar algún residuo de maquillaje o suciedad recogida del ambiente.
  • Aplique la mascarilla comenzando por la frente, baje hacia las mejillas, pero evite los parpados, y finalice en el cuello y escote.
  • Para retirar la mascarilla utilice agua a temperatura ambiente y seque su rostro con una toalla limpia en forma de toquecitos.
  • Finalice el proceso con tonificadores naturales como el agua de rosas, miel y té verde.

A continuación, le mostramos dos mascarillas, una para rejuvenecer el rostro y otra para iluminarlo:

 

Rejuvenecimiento: mascarilla de miel, yogurt y limón

Esta poderosa mascarilla para rejuvenecer el rostro es ideal para el cuidado de todo tipo de piel, gracias a la perfecta mezcla de sus ingredientes.

La miel humecta y da brillo; el yogurt, por su ácido láctico, ayuda a eliminar las células muertas y con esto ayuda a combatir los signos de envejecimiento; el limón es un potente limpiador que reduce manchas y cicatrices, para recuperar el tono uniforme de la piel.

Necesita:

  • 3 cucharadas de miel
  • ½ taza de yogur natural
  • 5 gotas de limón
  • Preparación: en un recipiente mezcle muy bien todos los ingredientes y luego aplíquela sobre el rostro y cuello, déjela actuar por 20 minutos y retire la mascarilla con agua a temperatura ambiente. Se recomienda repetir el proceso 2 veces por semana y con esto obtendrá resultados más favorables.

 

Iluminación: mascarilla de banano y leche

Esta mascarilla es ideal para iluminar la piel y tiene un efecto matizador de las arrugas.

Las propiedades del banano como el fósforo, potasio y vitaminas C y A, junto con las propiedades de la leche rica en calcio, magnesio y vitaminas D y B12 crean una potente mascarilla.

Necesita:

  • Un banano que no esté tan maduro (guárdelo al menos un día entero en la nevera, para que esté bien fresquito).
  • 3 cucharadas de leche corriente/almendras/avena (que haya estado en refrigeración al menos un día entero)
  • Un recipiente para hacer la mezcla
  • Preparación: corte el banano en rodajas pequeñas, añada las cucharadas de leche y machaque todo con una cuchara. Cuando tenga una pasta homogénea aplíquela en el rostro y cuello, deje actuar 20 minutos y retire con agua a temperatura ambiente.