Grupo Mutual de Alajuela, vive las buenas prácticas laborales participando activamente los miembros de esta organización, hombres y mujeres, en actividades que impulsan la igualdad de género y el respeto a los derechos humanos de las mujeres.
Son muchas las empresas que dicen ser responsable socialmente, y observamos varis acciones dirigidas a la conservación del ambiente y patrocinios a grupos con desventajas económicas, sin embargo, cuando se observa la cantidad de hombres y mujeres que conforman su fuerza laboral, más aún, la composición de género en la alta gerencia y en la Junta Directiva, nos damos cuenta que “del dicho al hecho hay un gran trecho”.
Pero esta no es la situación del Grupo Mutual de Alajuela, todo lo contrario, los cambios que se han dado en los últimos 10 años en esta organización han evidenciado un gran paso en el cierre de brechas de género en el ámbito laboral que ha servido de ejemplo a otras empresas y han sido reconocidas por instituciones públicas como el INAMU.
Ver a sus empleados varones participando junto a las compañeras de labor, en charlas, foros y marchas vinculadas a temas de igualdad de género, en donde predominantemente asisten mujeres, es común en Grupo Mutual, como en la Marcha del Día de la eliminación de la violencia contra las mujeres, realizada el pasado viernes, en donde
Este liderazgo en temas de igualdad de género ha sido impulsado por Mayela Rojas Solórzano, Sub Gerente General de Grupo Mutual. Ella, con el apoyo del Gerente General y la Junta Directiva de esta organización financiera, se comprometió a tomar medidas que promueven la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, dirigiendo acciones a favor de la igualdad sustantiva, que en general se resume en la aplicación de buenas prácticas laborales.
Qué son las Buenas Prácticas Laborales
La OIT señala que una buena práctica en materia de relaciones laborales es aquella experiencia de carácter colectivo que, en el marco del respeto a los principios y derechos fundamentales del trabajo, puede ser calificada exitosa para garantizar el bienestar de los trabajadores y el progreso de las empresas, mejorando el nivel de relaciones internas, garantizando condiciones adecuadas de trabajo y empleo, facilitando el incremento de la productividad y el salario, desarrollando una cultura de concertación puesta en marcha por el acuerdo de trabajadores y empleadores; es decir, facilitando una trabajo decente.
Según el INMU, las buenas prácticas laborales contribuyen a eliminar conductas discriminatorias y provocan cambios en la cultura y gestión organizacional, por ejemplo, la comunicación no sexista; las licencias de paternidad para aquellos colaboradores que van a tener una hija o un hijo o tienen responsabilidades de cuido con algún familiar; así como la adecuación de horarios, jornadas de trabajo y oportunidades de capacitación, considerando las necesidades y especificidades de mujeres y hombres.
