Cada 10 de marzo se conmemora el Día Internacional de la Jueza, fecha para destacar que, aunque parece que existe una equidad en los nombramientos de juezas, las mujeres presentan obstáculos para ser nombradas en puestos de mayor jerarquía
Magda Díaz Bolaños*
Bajo el lema “Para lograr justicia, necesitamos más mujeres en la justicia”, la Organización de Naciones Unidas hace un llamado a que más mujeres formen parte de los puestos de alta dirección de los Poderes Judiciales del mundo.
En el Poder Judicial de Costa Rica, según datos de la Dirección de Gestión Humana a la fecha, en la magistratura únicamente se encuentran nombradas nueve mujeres, lo cual representa un 40.91% de la totalidad de personas que integran la Corte Suprema.
En términos globales las mujeres que ocupan cargos en la judicatura son 833, frente a 669 varones. Sin embargo, parece que existe una equidad en los nombramientos, pero las mujeres presentan obstáculos para ser nombradas en aquellos de mayor jerarquía. De la totalidad de cargos de categoría 4 y 5, los de más alta jerarquía en el escalafón, únicamente un 44,55% mujeres ocupan esos puestos.
Otro dato de importancia es la ausencia de normativa clara y precisa para obligar a los órganos de designación a cumplir con cuotas, como ocurre en los puestos para diputaciones y cargos municipales.
Es relevante se obligue a quienes designan tanto los puestos de la Corte Suprema de Justicia como en los demás cargos en la judicatura se respete la equidad. También se debe asegurar a las magistradas y juezas el ejercicio de sus funciones libre de cualquier forma de manifestación de violencia. Si bien para el flagelo de la violencia sexual y el acoso laboral existe normativa para investigarla y sancionarla, debe ser revisada.
Es necesario reformular algunos aspectos e incorporar protocolos elaborados de forma consensuada, particularmente cuando se generan en el entorno del Poder Judicial; y, la creación de protocolos para evitar la revictimización.
Por otra parte, se debe trabajar arduamente en la creación de reglamentos para prevenir, sancionar y reparar la violencia generada a las magistradas y juezas en el ejercicio del cargo.
Las mujeres juezas están comprendidas en los alcances de la Ley para prevenir, atender, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en la política (Ley N° 10235). Las mujeres juezas en el ejercicio del cargo vierten opiniones y no deben ser sometidas o amenazadas por hacerlo. Algunos de los actos violentos que se deben resaltar, en el marco de esta conmemoración, son las persecuciones e intimidaciones de las personas usuarias de la administración de justicia, de los medios de comunicación y de los otros poderes estatales incluyendo los organismos de control, con afectaciones en el desempeño del cargo y con repercusiones en la integridad personal, familiar y patrimonial de juezas y magistradas.
En Costa Rica no existen mecanismos claros para prevenir, combatir, erradicar, investigar y resarcir este tipo de violencia. Cualquier forma de violencia contra las mujeres juezas es una forma de discriminación y atenta contra sus derechos humanos.
Exigimos respeto y los mecanismos efectivos para ejercer el cargo libre de cualquier manifestación de la violencia.
*Magda Díaz Bolaños, presidenta Asociación Costarricense de Juezas
Foto: Pavel Danilyuk