Dos mujeres integrarían la próxima pareja que camine por la Luna, según el plan de la Administración Nacional de la Aeronáutica y el Espacio (National Aeronautics and Space Administration, NASA).
Al formular el anuncio, cuando se dirigió, el 25 de este mes, al Congreso Internacional de Astronáutica (International Astronautical Congress, IAC), llevado a cabo en Washington, el administrador de la NASA, Jim Bridenstein, dijo que se trata del alunizaje que, para 2024, se proyecta llevar a cabo en el marco del programa espacial Artemisa (Artemis).
El programa tiene el nombre de la diosa griega de los animales salvajes, la tierra virgen, los nacimientos, la virginidad, las doncellas, quien, además, curaba a las mujeres enfermas.
El anuncio de Bridenstein marcó una modificación en cuanto a los integrantes de la pareja de astronautas a participar en la misión, de acuerdo con lo indicado por la NASA, en su sitio en Internet.
“Con el programa Artemisa, llevaremos a la primer mujer y al próximo hombre a la Luna, para 2024, usando tecnologías innovadoras para explorar más de la superficie lunar, que nunca antes”.
Los astronautas Neil Armstrong y Buzz Aldrin fueron, el 20 de julio de3 1969, los primeros estadounidenses en llegar a la luna, en el marco de la misión espacial Apolo 11, de la Nasa.
Armstrong fue el primero en tocar la superficie lunar.
Para llevar a cabo la nueva misión, Bridenstein aseguró que “hay grandes mujeres en la NASA”.
Se trata de la tercera misión del programa Artemisa, la primera de las cuales está programada para 2020, de acuerdo con la información oficial.
El anuncio fue formulado siete días después de que las astronautas estadounidenses Christina Koch y Jessica Meir se convirtieron, el 18 de octubre, en las más recientes protagonistas de la conquista del espacio.
Integrantes del equipo que cumple misión en la Estación Espacial Internacional (International Space Station, ISS), las dos astronautas de la NASA protagonizaron la primera caminata espacial conjunta llevada a cabo por mujeres.
Koch y Meir salieron de la estructura, para reemplazar una de las cuatro baterías del sistema eléctrico de la estación, tarea que insumió algo más de siete horas, informó, entonces, la agencia espacial estadounidense.
La cosmonauta rusa Svetlana Savitskaya se convirtió, en julio de 1984, en la primera mujer caminante en el espacio, cuando llevó acabo una actividad extravehicular (extravehicular activity, EVA).
La astronauta Kathy Sullivan se constituyó, en octubre de ese año, en la primera estadounidense en llevar a cabo una EVA, seguida, a lo largo de los 35 años siguientes, por más de una docena de colegas compatriotas, siendo Koch y Meir las más recientes hasta ahora –respectivamente, decimotercera y decimocuarta-.
Las mujeres están consolidando su decisiva participación en la conquista del espacio, y, en el caso de la misión Artemisa III, este empoderamiento femenino marcará un paso trascendental, ya que, según lo indicado por la NASA, “usaremos lo que aprendamos, sobre y alrededor de la luna, para dar el próximo salto gigantesco: enviar astronautas a Marte”.