No tendremos una sociedad libre e igualitaria hasta que todas las personas sean libres e iguales. Hasta que las mujeres disfruten de los mismos derechos que los hombres, esta desigualdad es un problema de todas las personas
Todas las personas somos titulares de derechos humanos. Entre ellos están los relativos a vivir sin violencia ni discriminación, a gozar del más alto nivel posible de salud física y mental, a recibir educación, a la propiedad, a votar y a ganar el mismo salario por el mismo trabajo.
Pero, en todo el mundo, muchas mujeres y niñas siguen sufriendo discriminación debido a su sexo y a su género. La desigualdad de género es la causa de muchos problemas que afectan de forma desproporcionada a las mujeres y niñas, como la violencia en el seno familiar y la violencia sexual, salarios más bajos, la falta de acceso a la educación y una asistencia sanitaria inadecuada.
Los movimientos de derechos de las mujeres luchan arduamente desde hace muchos años para abordar esta desigualdad, haciendo campaña para cambiar las leyes o tomando las calles para exigir que se respeten sus derechos.
De la lucha por los derechos humanos surgen grupos feministas, que, en esencia, creen que las mujeres tienen derecho a la igualdad política, económica y social. El feminismo se compromete a garantizar que las mujeres pueden disfrutar plenamente de sus derechos en igualdad de condiciones con los hombres.
El feminismo interseccional es la idea de que todas las razones por las que una persona puede ser discriminada, como la raza, el género, la orientación sexual, la identidad de género, la clase económica y la discapacidad, entre otras, se solapan e interactúan entre sí.
No tendremos una sociedad libre e igualitaria hasta que todas las personas sean libres e iguales. Hasta que las mujeres disfruten de los mismos derechos que los hombres, esta desigualdad es un problema de todas las personas, por lo anterior hay que eliminar todo tipo de violencia como las que mencionaremos a continuación:
La violencia de género
La violencia de género se produce cuando se cometen actos violentos contra mujeres y personas LGBTI debido a su orientación, identidad de género o características sexuales. Un número desproporcionado de mujeres y niñas sufre violencia de género.
Las mujeres y niñas en situaciones de conflicto corren especial riesgo de sufrir violencia y, a lo largo de la historia, la violencia sexual se viene usando como arma de guerra. Por ejemplo, hemos documentado el número mujeres que huyeron de los ataques de Boko Haram en Nigeria y fueron objeto de violencia sexual y violación a manos de las fuerzas armadas nigerianas.
Globalmente, un promedio del 30% de las mujeres que han estado en una relación ha experimentado violencia física y/o sexual a manos de su pareja. Las mujeres tienen más probabilidades de sufrir una agresión sexual, incluida la violación, y de ser víctimas de homicidios en nombre del “honor”.
La violencia contra las mujeres es una violación grave de los derechos humanos. Es el Estado el que tiene la responsabilidad de proteger a las mujeres de la violencia de género, incluso de los malos tratos en el seno de la familia que se cometen a puerta cerrada.
Violencia sexual y acoso
Acoso sexual es cualquier conducta no deseada de naturaleza sexual. Pueden ser conductas o avances físicos, exigir o pedir favores sexuales o el uso de lenguaje sexual inadecuado.
La violencia sexual es cuando alguien es objeto de una agresión sexual. Aunque los hombres y niños pueden también ser víctimas de violencia sexual, son las mujeres y niñas las que se ven afectadas de forma abrumadora.
Discriminación laboral
Las mujeres suelen ser objeto de discriminación de género en el ámbito laboral. Una forma de ilustrar esto es analizar la brecha salarial de género. Recibir el mismo salario por el mismo trabajo es un derecho humano, pero una y otra vez, se niega a las mujeres el acceso a un salario justo e igual. Algunas cifras recientes muestran que las mujeres ganan en la actualidad alrededor del 77% de lo que ganan los hombres por el mismo trabajo. Esto lleva a una vida de disparidad económica para las mujeres, les impide ejercer plenamente su independencia y representa un mayor riesgo de pobreza a lo largo de su vida.
Discriminación basada en la orientación sexual y la identidad de género
En muchos países del mundo, se niegan a las mujeres sus derechos debido a su orientación sexual, identidad de género o características sexuales. Las mujeres lesbianas, bisexuales, trans e intersex, y las personas que no se ajustan a las convenciones de género sufren violencia, exclusión, acoso y discriminación. Muchas son también objeto de violencia extrema, incluidos la violencia sexual, la “violación correctiva” y los homicidios en nombre del “honor”.
Derechos sexuales y reproductivos
Todas y cada una de las mujeres y niñas tienen derechos sexuales y reproductivos. Esto significa que tienen derecho a la igualdad de acceso a servicios de salud como la contracepción y el aborto sin riesgos; a decidir si quieren contraer matrimonio, cuándo y con quién; y a decidir si tener o no descendencia, cuándo y en qué número.
Las mujeres deben poder vivir sin temor a la violencia de género, que abarca la violación y otros actos de violencia sexual, la mutilación genital femenina (MGF), el matrimonio forzado, el embarazo forzado, el aborto forzado y la esterilización forzada.
Muchas mujeres y niñas de todo el mundo singuen sin tener acceso a un aborto sin riesgos y legal. En varios países, las personas que no pueden o no quieren continuar con el embarazo suelen verse obligadas a tomar una decisión imposible: poner su vida en peligro o ir a la cárcel.
Libertad de circulación
La libertad de circulación es el derecho a desplazarse libremente por donde deseemos; no sólo dentro del país en el que vivimos, sino también a visitar otros. Pero muchas mujeres tienen auténticas dificultades en lo que a esto se refiere. A veces no les permiten tener un pasaporte propio o deben contar con el permiso de un tutor varón para viajar.
Foto: Daniel Xavier
Reproducción editada de Amnistía Internacional
https://www.amnesty.org/es/what-we-do/discrimination/womens-rights/