El amaranto, un alimento básico para civilizaciones como los aztecas, es la semilla de una planta herbácea del género Amaranthus, originaria de América, cultivada hace miles de años
Aprovechando la fama actual del personaje “Amaranta” de la popular serie “Cien años de soledad”, les escribiré de una planta llamada amaranto que es un grano ancestral con un gran valor nutricional y terapéutico, considerado por muchos como un «superalimento».
El amaranto es la semilla de una planta herbácea del género Amaranthus, originaria de América. Se cultiva desde hace miles de años, siendo un alimento básico para civilizaciones como los aztecas. Se le considera un pseudocereal, ya que se consume como un cereal, pero no pertenece a la familia de las gramíneas.
El amaranto destaca nutricionalmente por su alto contenido de:
• Proteínas: contiene todos los aminoácidos esenciales, incluyendo la lisina, que a menudo es limitada en otros cereales. Esto lo convierte en una excelente fuente de proteína completa, especialmente para vegetarianos y veganos.
• Fibra: rico en fibra dietética, lo que favorece la digestión, el tránsito intestinal y la sensación de saciedad.
• Minerales: aporta cantidades significativas de hierro, calcio, magnesio, fósforo y potasio.
• Vitaminas: contiene vitaminas A, B, C y E, además de ácido fólico y niacina.
• Antioxidantes: posee compuestos antioxidantes que ayudan a proteger al organismo del daño de los radicales libres.
• No contiene gluten: es apto para personas con enfermedad celíaca o sensibilidad al gluten.
Beneficios para la salud del amaranto
• Fuente de energía: su contenido de carbohidratos complejos proporciona energía sostenida.
• Control del colesterol: la fibra soluble del amaranto ayuda a reducir los niveles de colesterol malo en sangre.
• Salud ósea: su aporte de calcio y otros minerales contribuye al mantenimiento de huesos fuertes.
• Control del azúcar en sangre: su bajo índice glucémico ayuda a regular los niveles de glucosa en sangre.
• Salud digestiva: la fibra previene el estreñimiento y promueve un microbiota intestinal saludable.
• Fortalecimiento del sistema inmunológico: las vitaminas y antioxidantes fortalecen las defensas del organismo.
El amaranto se puede consumir de diversas maneras
• Grano entero: se cocina de forma similar al arroz o la quinoa.
• Harina: se utiliza para preparar panes, galletas, tortillas y otros productos horneados.
• Hojuelas: se consumen como cereal para el desayuno o se añaden a yogures y batidos.
• Palomitas de amaranto: los granos se pueden tostar para hacer palomitas, un snack saludable.
• Hojas: las hojas tiernas de la planta también son comestibles y se pueden consumir en ensaladas o cocidas como espinacas.
El amaranto se puede encontrar en tiendas de productos naturales, herbolarios, supermercados y mercados locales, pero siempre antes de consumirlo consulte a su médico.
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