Para la ministra de la Igualdad de España, Ana Redondo, la violencia de género constituye una forma de terrorismo, que se manifiesta como la realidad cotidiana de las víctimas

Se trata de una situación que, por lo general, atrapa a las agredidas, al punto que les imposibilita formular la necesaria denuncia, sin la cual los atacantes quedan cubiertos por la impunidad.

En la visión de la ministra española de Igualdad, Ana Redondo, las mujeres en situación de vulnerabilidad, conviven con el peligro de que las agresiones se repitan.

De acuerdo con cifras reveladas en versiones periodísticas españolas, durante el período de enero a noviembre de este año, el femicidio cobró la vida a por lo menos 54 mujeres.

“Muchas mujeres están viviendo el terror”, expresó Redondo, en declaraciones que formuló, el 30 de octubre, a medios de comunicación.

“Esto sí que es terrorismo, terrorismo diario”, denunció, a continuación, la centroizquierdista abogada quien asumió, el 21 de noviembre, la titularidad del ministerio, en reemplazo de Irene Montero (2020-2023).

El dramático cuadro de situación en que suelen estar, impide que una proporción importante de víctimas de a conocer lo que ocurre, aunque se trata de un elemento fundamental para judicializar los casos, indicó.

“Muchas veces (resulta) imposible pedirles que denuncien, que salgan de ese túnel terrible, pero, sin esa denuncia, no podemos dar más pasos”, explicó.

En ese sentido, en declaraciones que formuló el 1 de noviembre, a la cadena SER (Sociedad Española de Radiodifusión), la ministra señaló el registro de cuatro fallecimientos por femicidio, en las 72 horas transcurridas del 27 al 29 de octubre -tres de ellos, en Madrid-.

“Es una semana dolorosísima, todos sentimos una gran conmoción”, dijo.

De acuerdo con versiones periodísticas españolas, una mujer y su hija fueron asesinadas por la pareja de la madre, en un hecho de violencia ocurrido en el sector madrileño de Carabanchel.

Por otra parte, el 28, también en Madrid, otra mujer, fue degollada por su compañero sentimental.

Además, una mujer quien, víctima de violencia machista se hallaba en coma, hacía tres días, falleció, el 29, en la localidad de Sagunto, en la centroriental provincia costera de Valencia, a causa de que su pareja la estranguló.

En el primer caso, la orden judicial para que el agresor se mantuviese alejado de la víctima, había quedado sin efecto a causa de la absolución del atacante.

Al respecto, Redondo señaló que “había un sistema que, después de 16 meses -por lo que sea-, no se reeditó, y eso es lo que hay que ver”.

“Hay que ver por qué, una mujer que entra dentro de los sistemas de protección, a partir de un momento, estos no protegen suficientemente a la víctima”, agregó, además de reafirmar que “no sabemos qué pudo pasar para que, 16 meses después, no se mantuviera el sistema”.

En referencia al femicidio, como crimen, la ministra señaló que “hay que tener en cuenta que los asesinatos son la manifestación más salvaje de la violencia machista estructural”.

“El patriarcado es un sistema de dominación que niega la igualdad, y, por tanto, tenemos un problema estructural secular”, siguió denunciando, para reafirmar que “no es actual, es un problema que arrastramos”.

No obstante los dramático de la situación, dado el limitante contexto social en el cual son agredidas, “las mujeres no denuncian todo lo que deberían denunciar”, señaló.

A ello se suma el hecho de que, en materia preventiva y de amparo a las agredidas, “no hay un sistema perfecto”, aseguró.

“Ojalá tuviéramos el sistema adecuado para responder a cada una de las mujeres”, expresó, para aclarar que “no hay, lamentablemente, sistemas perfectos”.

Redondo puntualizó que “aún queda mucho por hacer”, en la lucha contra el machismo agresor, no obstante lo cual aseguró que “se ha avanzado”.

Aunque ha reconocido que aún queda «mucho por hacer», ha asegurado que «se ha avanzado», y considera que para hacer frente al problema, se deben «redoblar todos los esfuerzos» y, sobre todo, tener «más coordinación».

En ese sentido, hizo referencia al Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género (Sistema VioGén), que el Ministerio del Interior implementa, a través de Secretaría de estados de Seguridad, aunque admitió que las más recientes víctimas de femicidio se hallaban registradas en ese mecanismo.

De acuerdo con la definición oficial, el VioGén es el marco para la implementación de “medidas de protección integral contra la violencia de género”.

Vigente desde el 26 de julio de 2007, el sistema apunta a “establecer una tupida red que permita el seguimiento y protección de forma rápida, integral y efectiva de las mujeres maltratadas, y de sus hijos e hijas, en cualquier parte del territorio nacional”.

La ministra reconoció que el VioGén ha presentado deficiencias, respecto a lo cual subrayó que “esos sistemas no se refuerzan, o no se protege suficientemente a la víctima”.