Encerrado en una celda, en una instalación judicial, el agresor estadounidense Harvey Weinstein cayó, por segunda vez consecutiva, acusado penalmente de haber cometido violencia sexual

La primera vez fue en 2020, en un tribunal en la nororiental ciudad de Nueva York, cuando fue condenado a 23 años de prisión, por los cargos de violación y agresión sexual.

Ahora, el 19 de diciembre, fue en una corte en la costera ciudad de Los Ángeles -que aloja a Hollywood-, en el oeste de Estados Unidos, su principal ámbito de acción profesional -como director cinematográfico- y personal -como depredador sexual-, ya que allí se ubica el centro nacional -y mundial- de la industria de las películas.

Weinstein fue trasladado, de la oriental costa atlántica a la occidental costa pacífica, para ser enjuiciado, por siete cargos de violación y agresión de naturaleza sexual contra -en este proceso penal- cuatro mujeres, ataques ocurridos en dos hoteles -respectivamente en Los Ángeles y en la cercana ciudad de Beverly Hills-, de acuerdo con versiones periodísticas.

El agresor fue hallado culpable de haber cometido tres de los siete delitos que le fueron tipificados, según las mismas fuentes, que, además, precisaron que las agresiones ocurrieron, según la acusación, en 2005-2013.

El nuevo fallo en su contra, podría sumar 24 años de prisión a la condena que cumple hace dos años, indicaron los medios.

En su alegato de cierre del juicio -que se extendió durante meses-, la fiscala adjunta de Distrito de Los Ángeles, Marlene Martínez, denunció que Weinstein se valió del poder que entonces tenía -como uno de los principales cineastas estadounidenses, para llevar a cabo los delitos.

Lo hizo, para engañar, a las víctimas, ya sea con el propósito de que le pernmiotiesen ingresar a las habiotaciones de hotel en las que, trespectivamente se hoispedaban -principalmente para rodaje de películas-, o para que ellas llegaran al luigar donde se alojara.

Al destacar que, por la imagen que proyectaba como exitoso realizador de obras cinematográficas -reunió el gran total de algo más de 300 nominaciones al Oscar, habiendo obtenido 81 veces el premio-, se le hacía fácil cumplir su papel de solapado victimario.

Al describir el contexto en el cual Weinstein manipuló a las agredidas, preguntó: “quién sospecharía que, tal titán de la industria del entretenimiento, sería un violador degenerado?”.

Por su parte, la abogada estadounidense Gloria Allred -representante de varias acusadoras en el proceso judicial, se declaró, conocido el veredicto, “muy contenta de que hubo condenas en este caso”.

Allred, abogada defensora de denunciantes de agresión sexual contra personajes tales como el ex presidente (2017-2021) estadounidense Donald Trump -conocido por su misoginia e irrespeto hacia las mujeres-, y los actores Bill Cosby, Charlie Sheen, Eddie Murphy, entre otros, destacó el hecho de que víctimas de Weinstein “hayan tenido su día en la corte”.

De acuerdo con versión es de medios de comunicación estadounidenses e internacionales, en ambos procesos penales, decenas de mujeres -incluidas varias actrices- señalaron a Weinstein como acosador y agresor sexual.

Sin embargo, su defensa ha afirmado, recurrentemente, que los casos datan de varios años atrás -algunos, de la década de 1970-, por lo que no es posible verificar la veracidad de esos señalamientos.

Weinstein fue declarado culpable de violación y agresión sexual, el 11 de marzo de 2020, por el juez James Burke, en Nueva York.

El fallo fue elogiado, inmediatamente, por el fiscal de Distrito del Condado de Nueva York, Cyrus Vance Jr, quien entonces dijo que “agradecemos a la corte por haber impuesto una condena que notifica a los depredadores sexuales y a las parejas abusivas”.

“Agradecemos a las sobrevivientes por sus extraordinarias declaraciones (…) y su indescriptible valentía durante los pasados dos años”, dijo el fiscal, en referencia a los testimonios aportados por las denunciantes.

Al respecto, reflexionó que “sus palabras derribaron a un depredador, y lo pusieron detrás de las rejas, y dieron esperanza a sobrevivientes de violencia sexual en todo el mundo”.