La primera vicepresidencia en la historia de Estados Unidos, Kamala Harris, expresó, poco después de su juramentación en el cargo, la esperanza de que el pueblo sea capaz de haber adquirido nueva sabiduría durante lo que describió como el calvario que significó el recién concluido cuatrienio presidencial.

En declaraciones difundidas en la red social Twitter, también exhortó, a sus compatriotas, a la unidad.

“Mi permanente esperanza -mi permanente oración- es que salgamos de este calvario, con una nueva sabiduría”, escribió Harris, ahora registrada en la historia como la primera mujer, la primera afrodescendiente, y la primera descendiente surasiática quien ocupa la posición.

Igualmente, llamó a los estadounidenses a “atesorar momentos sencillos. Imaginar nuevas posibilidades. Y abrir mutuamente nuestros corazones, apenas un poco”.

Asimismo, tuiteó que es necesario reconocer que, sin perjuicio de coyunturas, existe unidad, como nación.

“Aunque quizá estemos separados físicamente, nosotros, el pueblo estadounidense, estamos unidos en espíritu”, señaló.

Harris también incluyó, en otro mensaje, en la misma red social, la seguridad de que se desempeñará “por el pueblo -siempre-“.

Y en un tuit que difundió temprano la mañana del 20 de enero, algo menos de cinco horas antes de su juramentación, la nueva vicepresidenta homenajeó al histórico movimiento femenino estadounidense.

“Estoy aquí hoy debido a las mujeres quienes estuvieron antes que yo”, escribió, acompañando el texto con un video consistente en la reproducción de parte de su discurso de victoria electoral, en noviembre, e imágenes de su infancia y adolescencia, con su madre, así como de mujeres norteamericanas líderes.

En el pasaje, de poco más de un minuto y medio, seleccionado de ese mensaje, se refirió a ella como “la mujer principalmente responsable de mi presencia aquí hoy, mi madre Shyamala Gopalan Harris, quien siempre estará en nuestros corazones”.

“Cuando ella vino aquí, desde India, a la edad de 19, posiblemente no imaginó, del todo, este momento, pero ella creía, tan profundamente, en un Estados Unidos donde un momento como éste es posible”, expresó.

“De modo que estoy pensando en ella, y en las generaciones de mujeres -mujeres negras, asiáticas, blancas, latinas, mujeres nativas estadounidenses quienes, a lo largo de la historia de nuestra nación, han abierto el camino para este momento”, dijo, emotivamente.

“Mujeres quienes lucharon y sacrificaron tanto por la igualdad, la libertad, y la justicia para todos, incluidas las mujeres negras quienes con frecuencia -demasiada frecuencia- son ignoradas, pero quienes tan frecuentemente demuestran ser la columna vertebral de nuestra democracia”, continuó reflexionando.

“Todas las mujeres quienes han trabajado para asegurar y proteger el derecho al voto hace más de un siglo, hace 100 años, con la 19 Enmienda, hace 55 años con la Ley de Derecho al Voto, y (…) continúan la lucha por su derecho fundamental al voto y a ser escuchadas”, agregó, en alusión a instrumentos de la legislación nacional que garantizan el sufragio femenino.

“Reflexiono sobre su lucha, su determinación, y la fuerza de su visión (…) me paro sobre sus hombros”, subrayó.

La jornada, cuyo punto central fue la juramentación de Harris -la única mujer entre 49 titulares de la vicepresidencia estadounidense- y Joe Biden -como el 46 presidente del país-, estuvo marcada por la presencia femenina en la mayoría de sus diferentes segmentos.

Por una parte, Harris fue juramentada por Sonia Sotomayor, la primera magistrada de origen latinoamericano -de madre y padre puertorriqueños- en la Corte Suprema.

Asimismo, en dos de las tres porciones artísticas musicales, la cantante conocida como Lady Gaga, interpretó el himno nacional, mientras la actriz y cantante de origen puertorriqueño Jennifer López -popularmente conocida como J-Lo-, interpretó dos temas que destacan el patriotismo estadounidense.

Y la poeta afroestadounidense Amanda Gorman, de 22 años, leyó, emotivamente, una composición de su autoría, referida a la reconstrucción y la reconciliación nacionales luego de la cuestionada presidencia de Trump (2017-2021).

“Reconstruiremos, reconciliaremos”, expresó Gorman, además de asegurar que “nunca más sembraremos división”, y de declarar que Estados Unidos “es una nación que no está rota (…) un país ”lastimado pero libre”.

El extenso poema hizo alusión, entre otros temas, a la violenta invasión, el 6 de enero, del Capitolio -la sede del Poder Legislativo estadounidense, donde se lleva a cabo las juramentaciones presidenciales-, por parte de centenares de simpatizantes de Trump.

La acción -con saldo de cinco víctimas fatales-, ocurrida exactamente dos semanas antes, fue incitada por Trump, como parte de su esfuerzo por deslegitimar el triunfo electoral logrado por Biden, en la votación presidencial del 3 de noviembre.

En flagrante contradicción con lo que es la tradición en estos casos, Trump no estuvo presente en la juramentación de Biden.