Según los expertos, la IA no solo refleja el machismo propio de la sociedad sino que lo amplifica, al presentar estereotipos magnificados, como mujeres casi perfectas, y en contraparte, mujeres en roles tradicionales
Estudios de organizaciones internacionales, como la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Unesco, y las voces de muchos expertos en educación, tecnología, y sociólogos, han publicado opiniones que coinciden en que la Inteligencia Artificial, AI, específicamente en la recolección de los datos y la información de origen, refleja prejuicios sobre hombres, pero mucho más sobre las mujeres.
Según los expertos y expertas consultados, la IA no solo refleja el machismo propio de la sociedad, sino que lo amplifica, al presentar estereotipos magnificados, como mujeres casi perfectas.
Un vídeo con expertos en el tema, como Lorena Jaume-Palasí, fundadora de Ethical Tech Society; Francisco Sierra, de la Asociación de Prensa de Madrid (APM) y Thais Ruiz, fundadora y directora de Digital Fems, en el cual se analiza la pirámide del machismo en la inteligencia artificial, analiza cómo la tecnología de inteligencia artificial aporta grandes beneficios en muchos ámbitos, pero sin unas barreras éticas corre el riesgo de reproducir los prejuicios y la discriminación del mundo real, alimentar las divisiones, amenazar los derechos humanos y las libertades fundamentales.
Las técnicas, ahora simples de implementar en la computadora o desde el celular, en donde observamos mujeres famosas, o sencillamente “la vecina”, desnuda e incitando sexualmente a la audiencia, pero que no son reales, han desatado polémicas a nivel internacional. Estas técnicas, conocidas como deepfakes, que son vídeos, imágenes o voces manipuladas creadas por un software de inteligencia artificial, parecen reales y es casi imposible distinguirlas.
Una gran amenaza es la aplicación de este tipo de inteligencia artificial a menores de edad, promoviendo la violencia sexual en un mundo en el cual, aproximadamente uno de cada cinco niños -solo en Europa- es víctima de algún tipo de violencia sexual y una de cada siete víctimas es menor de seis años. A nivel mundial el número de niñas que sufren abusos es entre 1,5 y 3 veces mayor que el de niños.
Un estudio de la Unesco certifica cómo los modelos de lenguaje discriminan a las mujeres y las minorías y alerta sobre cómo les puede dificultar su acceso a empleos, créditos o seguros, y analiza cómo la inteligencia artificial se está convirtiendo en otra amenaza más contra las mujeres, proyectándola como objeto sexual o una máquina de hacer bebés.
La Unesco sostiene que los modelos de lenguaje, como el empleado por ChatGPT, replican los prejuicios de género y raciales o la homofobia.
El contenido en Internet contiene sesgos de género, las imágenes son aún más machistas que los textos, y la inteligencia artificial reproduce e intensifica estos estereotipos.
Foto: Diana