A las millennials hay que verlas como socias de las empresas, incorporándolas en puestos directivos.
Es la fuerza laboral del momento y ante el relevo generacional, son las llamadas a ocupar los puestos de mando y liderazgo, y ante esto, los reclutadores y empleadores tienen un reto muy importante. Ellas son las mujeres millennials o generación “Y”. Así se desprende de un conversatorio realizado en el VII Congreso Mujer y Negocios del Programa para el Desarrollo de la Mujer Empresaria de la Cámara de Comercio de Costa Rica, en el cual participaron Cynthia Castro, del grupo RBA; Julio Castilla, de la empresa CMA, Ana Teresa Concepción, líder de Recursos Humanos para Walmart Centroamérica; Arturo Condo, profesor y ex rector del INCAE y Ericka Ocampo, ingeniera industrial de Intel.
Ana Teresa Concepción expresó que las mujeres generación “Y” valoran mucho la trayectoria de una compañía, operan con redes de apoyo e influyen en los equipos de trabajo.
“Nos obligan a un nuevo modelo de liderazgo y muchos de los jefes no pueden conectar con estas colaboradoras. Otro de los retos es incorporarlas en puestos directivos, ya que aunque no tienen la experiencia o la edad, poseen las habilidades necesarias y proponen soluciones”, destacó.
Las millennials representan un desafío desde la misma academia, así lo indicó Arturo Condo, quien contó que esta nueva generación de mujeres obligó al equipo docente del INCAE a implementar herramientas tecnológicas, además que son multitasking o multi tareas, algo que en este momento es considerada una habilidad blanda, muy buscada por los reclutadores.
Apoyo constante
Por su parte, Cynthia Castillo señaló que al ser las millennials mujeres emprendedoras, es necesario que las compañías abran espacios para que ellas puedan presentar proyectos, los cuales muchas veces se convierten en grandes ideas que aportan a la política de Responsabilidad Social.
Ericka Ocampo tiene una visión similar, pero ella destaca la flexibilidad, algo que para los millennials es vital, trabajar desde la casa les ofrece calidad de vida, en especial para aquellas mujeres que son madres, ya que las labores del hogar siguen recayendo en los hombros de las féminas.
“Es necesario apoyar el talento interno, llenar las plazas vacantes con el personal, apoyar económicamente y en horarios a quienes aún están estudiando, las millennials buscan empresas con programas de crecimiento profesional”, recalcó Ocampo.
Cambio cultural
Para Julio Castilla es imperante explicarle a la mujer millennial qué hace la empresa, cuál es la misión, visión y valores, cuál será su papel, ya que le gusta tener la información clara y algo fundamental, quien esté en el puesto de mando tiene que darle el ejemplo, si se le pide puntualidad, quien debe llegar primero a la oficina es el líder de grupo.
De igual forma es necesario dejar de lado el control constante, el marcar tarjeta o estar reportando cada cinco minutos lo que se está haciendo, a la millennial le gusta la libertad y que confíen en lo que hace.
Arturo Condo expresó algo muy importante: ya no ver a las mujeres millennials como empleadas o colaboradoras, sino como socias de la compañía, eso las hace sentir que su trabajo es importante.
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