Un hombre quien golpeó a una mujer en vía pública, en Ecuador, fue neutralizado por una experta en artes marciales, quien puso fin a la agresión
Una experta en artes marciales defendió a una mujer que era agredida por su pareja sentimental, en la occidental ciudad portuaria ecuatoriana de Guayaquil.
Se trata del principal centro económico y comercial del andino país sudamericano, donde están asentadas numerosas empresas manufactureras en el campo alimentario -fundamentalmente de productos a base de cacao y de café-.
El puerto de esa ciudad -capital de la occidental y costera provincia de Guayas-, es el punto por el cual se canaliza un 70 por ciento de las exportaciones y un 83 por ciento de las exportaciones nacionales, de acuerdo con estimaciones oficiales.
De acuerdo con lo relatado por los medios, la víctima en el incidente fue la pareja sentimental del atacante.
El hecho ocurrió, cuando Ruth Torello, instructora de defensa personal, caminaba por una calle de Guayaquil, en el marco de una discusión que se desarrollaba en una esquina, un hombre sostenía, con fuerza, a una mujer.
La víctima le rogaba que la soltase, lo que no ocurrió, dijo la responsable de una de las principales academias de artes marciales guayaquileñas, quien señaló que, en un momento del altercado, el agresor asestó, a la mujer, un golpe en el rostro.
Estaba produciéndose un forcejo, durante el cual “ella se intenta separar”, pero, en lugar de dejarla ir, al agresor “saca un derechazo (…) en la cara” de la víctima, de acuerdo con la narración de Torello, quien, de acuerdo con las versiones periodísticas, se desempeña como directora de la Academia de Artes Marciales del Municipio de Guayaquil.
“Yo, al ver esa reacción, lo primerito que hice fue meterme en medio de los dos”, para, inicialmente, al atacante, “sujetarle las muñecas”, y derribarlo, agregó Torello, quien ha sido campeona en disciplinas tales como judo y karate.
“Le apliqué una llave, y lo inmovilicé”, sobre la acera, “hasta que llegara la policía, y retuviera al ciudadano”, explicó.
La entrenadora hizo, asimismo, alusión a la indiferencia de numerosos peatones -lo mismo hombres que mujeres- quienes, no obstante la violencia de género que estaban presenciando, se abstuvieron de intervenir para impedir el ataque machista.
“Muchas personas estaban ahí alrededor, y nadie hacía absolutamente nada”, subrayó, molesta.
Neutralizado el agresor, los pasivos transeúntes aplaudieron y alabaron a Torello, por haber, decididamente, intervenido.
La deportista fue, igualmente felicitada, en la red social Twitter, por la Alcaldía de Guayaquil.
“Las artes marciales brindan herramientas de defensa ante casos de violencia. Ruth, con sus conocimientos, pudo someter a un sujeto con actitud violenta mientras agentes del @cuacme acudían al lugar”, tuiteó el gobierno local.
La sigla corresponde a la denominación del Cuerpo de Agentes de Control Metropolitano (Cuacme) de la ciudad portuaria ecuatoriana.
El gobierno municipal acompañó, el texto, con un video que muestra la intervención de Torello.
El material audiovisual incluyó declaraciones de la experta en defensa personal, quien, a manera de recomendación, dijo que “es muy importante que las niñas, que las mujeres, aprendan artes marciales”.
Ello, porque “este es el pan de cada día, y, por eso es que hay violencias, hay crímenes, y no podemos permitir eso”, explicó.
“Gracias a la colaboración de nuestra alcaldesa, la doctora Cynthia Viteri, es posible que muchas niñas, señoras, jóvenes, vengan a mis clases, a aprender defensa personal y karate”, precisó.
Por su parte, Viteri, también encomió la valiente acción.
“Ruth Torello trabaja en el Municipio dando clases de defensa personal a niñas y mujeres”, expresó Viteri, en redes sociales, para agregar: “¡Muy bien Ruth!”.
Algunos medios de comunicación citaron datos de la Entidad de las Naciones Unidas para Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU Mujeres), materia de agresión machista, en Ecuador, por lo menos 65 de cada 100 mujeres han sido víctimas de alguna variante de violencia de esa naturaleza.
Foto: Cottonbro