Es importante que la paciente tenga un kit de emergencia con antihistamínicos para mitigar la reacción alérgica y una tarjeta con los datos personales.

“No puedo comer eso, es que soy alérgica”, no es llamar la atención, hay personas que productos como la fresa, leche o sus derivados, camarones, atún o tomate les produce alergia.

Francisco Herrera, Ejecutivo de Medical Marketing y Estrategia de Nuevos Productos de Dos Pinos, indicó que es importante diferenciar entre una alergia alimentaria y una hipersensibilidad alimentaria, aunque ambos hacen referencia a reacciones adversas a alimentos, la alergia es una reacción del sistema inmunológico.

De acuerdo con Melania Cevo de Consultas Nutrición, las alergias a los alimentos se traducen como una relación causa- efecto entre la ingestión de un alimento y una respuesta anormal, lo que ha llevado a algunas personas a quitar de sus dietas ciertos productos con el fin de evitar reacciones en su cuerpo.

“Existen otras formas por la cuales el cuerpo humano reacciona, algunas de ellas son: realizar ejercicios dos o cuatro horas después de ingerir alimentos, cocinar con altas temperaturas debido a que el calor provoca que los productos pierdan su actividad in vitro y finalmente, ingerir fármacos”, explicó Cevo.

Lista negra

Son más de 70 productos que pueden desencadenar una reacción alérgica, sin embargo hay ocho que son los causantes del 90% de estas reacciones, estos son: huevo, leche y derivados, maní y derivados, nueces, pescado, mariscos, trigo y soya.

Herrera manifestó que a nivel mundial 1% a 3% de los adultos y de 4% a 6% de los niños presentan alguna alergia, los pequeños suelen serlo a la leche, huevo y maní, mientras que los adultos al polen, maní, nueves, pescado y mariscos.

“Hay alimentos declarados por el Codex Alimentarius que comúnmente pueden causar hipersensibilidad como lo son el trigo, centeno, cebada, avena, crustáceos, huevo, pescado, maní, soya, leche, nueces y sulfitos en concentraciones igual o mayores a 10mg/kg, así como los derivados de cualquiera de estos. Con el objetivo de reducir el riesgo de una reacción adversa es de carácter obligatorio la declaración de estos ingredientes y sus derivados en las etiquetas de los alimentos pre envasados en casos en los que haya presencia o riesgo de contaminación cruzada”, señaló Herrera.

La alergia se puede desarrollar en cualquier etapa, sin embargo algunos estudios señalan que la composición de la microbiota (conjunto de microorganismos que viven en un sitio en específico, a veces le dicen flora) puede predisponer a una persona a desarrollar algún tipo de alergia en el futuro.

Cuidados

Si usted sospecha ser alérgico o intolerante a algún alimento es mejor tener el diagnóstico de un especialista, la diarrea y el vómito son síntomas frecuentes que algo no anda bien.

Una vez que tenga certeza de cuál es el problema y qué lo causa, debe prestar mucha atención a lo que come: “algunos consejos al momento de hacer sus compras realice una lista de productos, lea la etiqueta, vigile la procedencia, conozca los ingredientes, los colorantes y saborizantes son propensos a contener alérgenos”, manifestó Cevo.

Francisco Herrera añadió que si asiste a un restaurante o cualquier otro establecimiento, se debe de informar al personal a cargo acerca de la alergia alimentaria, este punto es vital debido a que el único responsable de comunicar la alergia alimentaria es la persona en sí; no se debe de dar por sentado que los productos no contienen trazas del alérgeno.

Lea bien el menú, hoy los locales de comida describen los ingredientes que componen un platillo o bebida.

Tener una alergia no es sinónimo de dejar de comer, sino cuidar lo que ingiere.

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