En Centroamérica, una de cada dos mujeres migra por miedo a sufrir agresiones, daños físicos o morales

A nivel global, las mujeres representan el 49% de la migración y su número va en aumento, mientras que en América Latina estos números cambian y la Organización Internacional para las Migraciones de la ONU, sostiene que aumenta hasta un 51,1%.

Las razones de los desplazamientos de su país de origen a otro, se debe a que ellas buscan mejores condiciones de vida, escapar de situaciones de violencia familiar y comunitaria, reunirse con su familia y encontrar un empleo que les permita apoyar económicamente a sus hijos.

En Centroamérica una de cada dos mujeres migra por miedo a perder la vida o a sufrir agresiones y daños físicos y emocionales en sus comunidades de origen. Usualmente, las mujeres migrantes trabajan en oficios domésticos, agricultora, camareras y fábricas.

Sostiene la Organización Internacional del Trabajo, OIT, que las migrantes tienen mayor riesgo que los hombres de ser esclavizadas y ser víctimas de trata hasta explotación de las trabajadoras domésticas. “Hay millones de mujeres migrantes corriendo riesgos que dan pruebas de la carencia de protecciones adecuadas a sus derechos y de la ausencia de oportunidades para migrar sin riesgo y legalmente… Se estima, cada año hay entre 600.000 y 800.000 mujeres, hombres y niños que son objeto de trata a través de fronteras internacionales; de ellos, un 80% son mujeres y niñas», afirma la OIT.