Diferenciar sexualidad con erotismo es la clave ideal para entender de una mejor manera la autoexploración humana.
La sexualidad en las niñas es un tema que si bien muchas personas prefieren evitar, es una realidad y no hay por qué esconderla, sino todo lo contrario, saber hablarla.
La autoestimulación en ellas ocurre normalmente desde que tienen entre 3 y 4 años de edad, y es apartir de ahí que comienzan a tener conductas que reflejan su su curiosidad sexual.
María Lourdes Rivera Zúñiga, especialista en sexología educativa, opinó que todo lo relacionado con sexualidad y órganos sexuales especialmente en niñas asusta a los padres, ya que estos temas los relacionan con prohibición.
“El problema es que se tiende a relacionar sexualidad con erotismo, y eso en ocasiones se le transmite a las niñas. La respuesta sexual del ser humano la tenemos desde la infancia, y lo que ocurre es que no se percibe como una realidad, pero sucede”, comentó la sexóloga.
Existen sensaciones placenteras como rascarse un hombro, el abrazo de los padres, cambiar un pañal, entre otros. Sin embargo, esto es prácticamente imperceptible para los padres, además de que no se ve con ojos de sexualidad erótica por el simple hecho de que no tiene razón de ser.
Es por eso, que Rivera Zúñiga explica que de la misma manera en que se dan esas sensaciones y no son mal vistas, debería de verse cuando una niña se esté autoestimulando.
¡Mi hija se está tocando!
Esta situación resulta ser inquietante para muchos padres y adultos, empero, hay que destacar que son expresiones naturales que no deberían ser censuradas.
Según explicó la sexóloga, en caso de que los padres encuentren a sus hijas autoexplorándose, situación que es completamente normal, y no se sienten cómodos, las expresiones ideales a utilizar son la siguientes:
- Amorcito qué estás haciendo ¡Eso se hace en privado!
- Podés dejar de hacer eso y jugar con otra cosa.
- Tratá de que lo que estés haciendo no te cause ningún daño.
Lo que no deben hacer los padres
Rivera Zúñiga, explica que por nada del mundo debe hacerse sentir mal a la niña diciendo cosas hirientes o alzarles la voz, ya que lo más importante es no hacerlas sentir vergüenza y mucho menos culpa.
“Si usted encuentra a su hija autoexplorándose, lo ideal es cerrar la puerta sin decir absolutamente nada, al no ser que la niña esté utilizando un objeto que la lastime”, aclaró la séxologa.
Hable acerca del tema
Los padres pueden llegar a cuestionarse la edad adecuada para conversar de sexualidad con sus hijas, por lo que la sexóloga Rivera aconseja hacerlo apenas las niñas pregunten.
“Esto es mejor hablarlo desde que ellas están pequeñas, porque cuando crecen y tiene alrededor de 13 y 14 años de edad, no tienen la confianza para que te pregunten ese tipo cosas , ya que hay cierto grado de timidez en ellas”, concluyó la especialista.
Por su parte, la sexóloga cuenta con asesoría, talleres y charlas de cómo hablar este tipo de temas con los hijos. Si usted está interesada y desea contactarla, el correo electrónico es: lulerivera@gmail.com