La máxima autoridad del ciclismo mundial decidió excluir, a mujeres transgénero, de competencias internacionales de ese deporte

La discriminatoria medida rige -desde el 17 de julio- para las deportistas trans quienes hayan cumplido la transición después de la pubertad masculina, indicó, además, la Unión ciclista Internacional (Union Cycliste Internationale, UCI), en el comunicado que, sobre el tema, difundió el 14 de julio.

La categoría internacional general masculina pasó a denominarse Masculina/Abierta, de modo que puedan participar, bajo esa denominación, los deportistas quienes no son aptos para desempeñarse en competencias femeninas, agregó la entidad con sede en Mónaco.

La decisión fue adoptada durante la reunión extraordinaria que el Comité Administrativo de la UCI llevó a cabo el 5 de julio, de acuerdo con la información oficial.

El comité “decidió adaptar las actuales reglas de la UCI sobre el derecho de atletas transgénero a participar en competencias en el Calendario Internacional de la UCI”, planteó la entidad fundada, el 14 de abril de 1900, en París, y actualmente con sede en la occidental ciudad suiza de Aigle, próxima a la frontera con Francia.

“La reunión (…) tuvo lugar luego de un seminario sobre las condiciones para la participación de atletas transgénero en competencia femeninas de ciclismo, organizada, el 21 de junio, por la UCI”, agregó.

Durante el encuentro, “varias partes interesadas -atletas transgénero y cisgénero (cuya identidad de género y sexo al nacer, coinciden), expertos en los campos científico, legal, y de derechos humanos, instituciones deportivas- presentaron sus respectivas posiciones”, precisó.

“A partir de ahora, las atletas femeninas transgénero quienes haya transicionado después de la pubertad (masculina) tendrán prohibido participar en competencias de mujeres en el Calendario Internacional de la UCI -en todas las categorías-, en las variada disciplinas”, anunció, en el texto de nueve extensos párrafos.

“Para las Competencia internacionales Masters (…) la categoría Masculina (Men’s category) será denominada Masculina/Abierta (Men/Open), y cualquier atleta quien no reúna las condiciones para participación en competencias de mujeres será admitido sin restricción”, puntualizó.

“El comité administrativo de la UCI ha tomado nota del estado del conocimiento científico, que no confirma que por lo menos dos años de terapia hormonal (…) sea suficiente para, completamente, eliminar los beneficios de la testosterona durante la pubertad en los hombres”, siguió planteando.

“Sumado a ello, existe considerable variabilidad, entre personas, en la respuesta a terapia hormonal de género, lo que torna aún más difícil llegar a conclusiones precisas sobre los efectos de tal tratamiento”, según lo planteado.

Según el comité, “dado el estado actual del conocimiento científico, también es imposible descartar la posibilidad de que factores biomecánicos tales como la forma y el ordenamiento óseos, en sus extremidades, puedan constituir una ventaja duradera para las atletas femeninas transgénero”.

“Tomando en cuenta estos hallazgos, el Comité Administrativo de la UCI consideró los intereses de atletas transgénero en cuanto a poder participar en competencias deportivas, frente a aquellos (intereses) de las atletas en la categoría femenina, que es considerada una clase protegida”, aseveró, a confinación, la unión.

“En este contexto, el Comité Administrativo de la UCI llegó a la conclusión, considerando las persistentes incertidumbres científicas, que era necesario tomar esta medida, para proteger la clase femenina y asegurar oportunidades iguales”, planteó, además.

“Las nuevas reglas (…) podrán cambiar, en el futuro, a medida que evoluciones el conocimiento científico”, sostuvo, asimismo.

“Con esto en mente, la UCI iniciará deliberaciones con otros miembros del movimiento deportivo internacional sobre cofinanciamiento de un programa de investigación científica orientado a estudiar cambios en el rendimiento físico de atletas altamente entrenados quienes estén bajo tratamiento hormonal transicional”, reveló.

Citado en el comunicado, el presidente de la UCI, el político francés David Lappartient, asevero que, “en primer lugar, la UCI desearía reafirmar que el ciclismo -como deporte competitivo, actividad de esparcimiento, o medio de transporte- está abierto a todos, incluidas las personas transgénero, a quienes alentamos -como a todos los demás- a participar en nuestro deporte”.

“También me gustaría reafirmar que la UCI respeta y apoya, plenamente, el derecho de las personas a elegir el sexo que corresponda a su identidad de género, cualquiera sea el sexo asignado al nacer”, siguió afirmando.

“Sin embargo, es una obligación garantizar, por sobre todo, la igualdad de oportunidades para todos los competidores en las competencias de ciclismo”, expresó, a continuación.

“Es este imperativo lo que condujo a la UCI a llegar a la conclusión de que, dado que el actual estado del conocimiento científico no garantiza esa igualdad de oportunidades entre atletas femeninas transgénero y participantes femeninas cisgénero, no fue posible, como medida cautelar, autorizar, a las primeras, a correr en las categorías femeninas”, planteó.

Foto: The Lazy Artist Gallery